Durante su discurso anual a la nación el lunes, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó un aumento del 300 por ciento en el salario mínimo mensual y se comprometió a impulsar la producción de petróleo a 5 millones de barriles por día para 2025.
El incremento salarial entrará en vigencia esta semana, dijo Maduro en una transmisión de casi cuatro horas desde la asamblea nacional constituyente del país, luego de haberlo aumentado seis veces en 2018. Aun así, el nuevo salario mensual de 18.000 bolívares alcanza para comprar 1 kilogramo de jamón y asciende a cerca de US$7 al tipo de cambio del mercado negro, con una inflación anual de aproximadamente 240.000 por ciento.
Con el nuevo salario, de unos 7 dólares al tipo de cambio en el mercado paralelo, a los venezolanos les alcanzaría para comprar un kilo de carne, uno de pollo, de tomate y de cebolla, además de café y una docena de huevos.
Juan Guaidó: "Maduro ya no controla las Fuerzas Armadas"
Durante su discurso, Maduro dijo que las inversiones de naciones como China, Rusia, Turquía y Qatar podrían ayudar a reconstruir las industrias locales. "No soy un pelele, ni un capitalista, pero tampoco soy un obtuso", dijo Maduro. "Si alguien ofrece aportar capital privado u ofrece consejos para recuperar una empresa, ¿no debería tomarlo?"
Desde que asumió el cargo en 2013 luego de la muerte del líder Hugo Chávez, Maduro ha fallado repetidamente en sus esfuerzos de revisión de la economía del país. No está dispuesto a implementar medidas estrictas, como la reducción significativa de los subsidios al combustible, y el gobierno ha recurrido a políticas que, en esencia, solo buscan ocultar el problema.
China y Rusia, los salvavidas a los que se aferra Venezuela
La promesa del presidente de restaurar la industria energética también va contra corriente. La producción de petróleo cayó a aproximadamente 1 millón de barriles por día, la más baja en siete décadas. Venezuela tendría que triplicar la producción durante los próximos seis años del gobierno de Maduro para alcanzar su objetivo. El año pasado, el banco central recibió US$4.100 millones en monedas extranjeras de la estatal PDVSA, dijo, menos de la mitad del nivel de 2015.
Maduro indicó que asumiría personalmente la responsabilidad de aumentar la producción en todos los campos venezolanos y que apostaba su vida y honor por esta batalla.
