La industria de las aerolíneas no puede darse el lujo de esperar una vacuna. Ese es el mensaje de David Powell, asesor médico principal de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA por sus siglas en inglés).
Además de las mascarillas protectoras, el lavado de manos regular y la desinfección de las superficies de alto contacto, las aerolíneas deberían trabajar con los reguladores para introducir sistemas confiables de prueba de coronavirus para los pasajeros antes de abordar, para lograr que las personas vuelvan a volar.
“La protección ideal es evitar a las personas contagiosas”, dijo Powell en una entrevista con Bloomberg News. “Necesitamos una prueba que sea lo suficientemente confiable y rápida y que pueda realizarse en grandes cantidades”.
Ahora mismo, es una tarea difícil. Fabricantes de todo el mundo están haciendo todo lo posible por satisfacer la demanda de kits de prueba para detectar el covid-19. Y las múltiples pruebas que existen a menudo pueden generar más confusión que certeza.
El mes pasado, estalló una disputa entre Singapur y China después de que este último encontrara pasajeros contagiosos en un vuelo de la nación insular. Singapur dijo que la mayoría de las personas en cuestión se había recuperado, pero “pueden continuar eliminando fragmentos virales durante semanas o incluso meses”, lo que lleva a un resultado positivo.
Como casi nadie está viajando por negocios o placer, las aerolíneas están haciendo todo lo que está a su alcance para evitar el colapso. IATA, que representa a 290 operadores a nivel mundial, ha dicho que no prevé que el tráfico de pasajeros se recupere al menos hasta 2024, y estima que las aerolíneas perderán más de US$84.000 millones solo este año.
A medida que se desarrolla el conocimiento de los científicos del SARS-CoV-2, la postura de la profesión médica ha cambiado. A principios de febrero, cuando el covid-19 todavía era una gran interrogante en la mente de la mayoría de las personas, Powell dijo que la mejor manera de evitar la infección era lavarse las manos con frecuencia en lugar de usar mascarilla. En mayo, la recomendación de usar protecciones faciales era universal.
“Reconocemos que un porcentaje de los casos de covid puede ser asintomático”, dijo Powell a principios de esta semana. “Esa es la razón de ese cambio de postura”.