La segunda mayor minera de diamantes de Zimbabue anticipa un repunte de la demanda, después de que la pandemia de coronavirus obligara a RioZim Ltd. a suspender las ventas en marzo en medio de la caída de los precios de las gemas.
Con el cierre de las joyerías, el confinamiento de los cortadores y pulidores en sus casas y el estancamiento de los viajes mundiales, la industria del diamante se ha paralizado en los últimos seis meses. De Beers, el mayor productor, ha decidido recortar el precio de sus diamantes esta semana en un intento por impulsar las ventas, pero RioZim señaló que la demanda de los consumidores de piedras pulidas ya se está recuperando.
“De hecho, se ha recuperado con fuerza en algunas partes del mundo”, señaló Wilson Gwatiringa, portavoz de RioZim, por correo electrónico. “Como resultado, esperamos una recuperación inminente de la demanda de diamantes en bruto”.
Con el mercado de gemas en crisis, los accionistas de RioZim han mantenido el funcionamiento de la compañía mediante financiamiento puente, y la producción de su unidad Murowa Diamonds se ha reservado, según Gwatiringa. Los proyectos de expansión también se suspendieron, aunque RioZim ahora está contemplando un crecimiento en dos fases que aumentará en más de un 100% la producción de diamantes, señaló.
Una primera fase, con un coste de US$52 millones, prolongaría la vida útil de la mina Murowa, a 348 kilómetros al sureste de la capital, Harare, en cuatro años con respecto a los 14 meses actuales, dijo Gwatiringa. Una segunda fase de US$400 millones, que se está planificando en la actualidad, procedería a la construcción de la mayor mina de diamantes subterránea de Zimbabue.
Ello aumentaría la producción a 2,5 millones de quilates, 10 veces la cantidad producida cuando la mina era propiedad de Rio Tinto Group. La vida de la operación también se ampliará al menos otros 10 años, dijo Gwatiringa.
La minería es una fuente clave de divisas para Zimbabue, que se enfrenta a una escasez de alimentos y combustible, una inflación vertiginosa y una moneda en implosión. RioZim detuvo la producción en sus minas de oro en junio, diciendo que ya no puede cubrir los costes debido a la política cambiaria del Gobierno.