Se espera que la OPEP y sus aliados consideren restricciones de suministro más profundas cuando se reúnan este fin de semana en el contexto de un mercado petrolero mundial tambaleante.
Arabia Saudita y sus socios sorprendieron a los operadores y provocaron una feroz reprimenda del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, cuando anunciaron un recorte de 2 millones de barriles por día el mes pasado. Aun así, los precios se han debilitado desde entonces y descendieron brevemente a casi US$80 por barril en Londres, a medida que se deteriora la situación en China.
Los delegados del grupo, que hasta esta semana habían pronosticado que harían una pausa para evaluar el impacto de los recortes, ahora dicen que las reducciones adicionales podrían ser una opción. Las discusiones dentro de la alianza aún no han comenzado formalmente antes de la reunión del 4 de diciembre.
Estados Unidos estima que la producción de petróleo bajará en 2023
Riad ya envió al mercado una señal previa a la reunión inusualmente clara. La semana pasada, el ministro de Energía de Arabia Saudita, el príncipe Abdulaziz bin Salman, dijo que la OPEP+ estaba “lista para intervenir” con más reducciones de la oferta si fuera necesario “equilibrar la oferta y la demanda”.
Diez de los 16 operadores y analistas encuestados por Bloomberg esta semana anticiparon un nuevo recorte de suministro, con estimaciones que oscilan entre 250.000 y 2 millones de barriles por día. Los consultores FGE predicen que el recorte puede estar en el extremo superior del rango.
La Unión Europea suavizaría sanciones al petróleo ruso
Mientras que la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios parecen estar enfocados en los riesgos a la baja para el mercado, existen fuerzas compensatorias. El Brent se recuperó hasta un 3,4% a US$86 el barril el martes, ya que las señales de que el grupo está listo para actuar brinda apoyo a los futuros.
La alianza sigue bajo la presión de naciones consumidoras para evitar la inflación manteniendo los grifos abiertos. En particular, los recortes adicionales presentarían el riesgo de tensar aún más las relaciones entre el Gobierno de Biden y Arabia Saudita.
Los mercados globales están ajustados según algunas medidas y los inventarios en las naciones desarrolladas se encuentran en su nivel más bajo desde 2004. El día después de la reunión de la OPEP+, la Unión Europea impondrá una prohibición a las importaciones marítimas de crudo desde Rusia, mientras que un límite de precios sobre el petróleo del país también está siendo discutido por diplomáticos de la UE.
La producción rusa se desplomará un 15% a principios del próximo año cuando estas medidas surtan efecto, según la Agencia Internacional de Energía. Sin embargo, la producción de petróleo del país ha demostrado ser sorprendentemente resistente a las sanciones internacionales desde la invasión a Ucrania, y las previsiones de la AIE suelen ser demasiado pesimistas.