Economistas en Brasil redujeron las previsiones de inflación para este año y el próximo y recortaron las estimaciones para la tasa clave de fines de 2020, luego de un sorpresivo informe de los precios al consumidor.
La inflación alcanzará 3,28% este año y 3,73% el próximo, por debajo de las previsiones anteriores de 3,42% y 3,78%, respectivamente, según un sondeo semanal del banco central. Se trata de la tercera semana consecutiva en que los analistas reducen esas proyecciones para 2019 y 2020. Los economistas también rebajaron las estimaciones para la tasa referencial Selic para fines del próximo año de 5% a 4,75%.
Los precios al consumidor de Brasil cayeron inesperadamente en septiembre debido a que los costos de los alimentos se redujeron por segundo mes consecutivo y el alto desempleo afectó la demanda. El banco central ha recortado los costos de endeudamiento en dos reuniones consecutivas, y las cifras de la inflación del mes pasado impulsaron las apuestas de los mercados financieros de que podría producirse un ciclo de flexibilización más agudo.
La próxima reunión de política monetaria del banco central se realizará el 30 de octubre. Los formuladores de políticas en la economía más grande de América Latina apuntan a una inflación anual de 4,25% para este año y 4% para el próximo.
En otra publicación, el índice de actividad económica de Brasil, que es un indicador para el producto interno bruto, se elevó 0,07% en agosto respecto del mes anterior, lectura que no alcanzó las estimaciones de los economistas de un alza de 0,20%.
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