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Negocios

Telecom Italia en punto muerto sobre elección de líder

Los directores de la compañía no lograron ponerse de acuerdo sobre un nuevo líder para la compañía telefónica ante la candidatura para el puesto de dos ejecutivos.

telecom italia 11162018
Los directores de Telecom Italia SpA no lograron ponerse de acuerdo sobre un nuevo líder para la compañía telefónica en una reunión el jueves ante la candidatura para el puesto de dos ejecutivos. | Bloomberg

Los directores de Telecom Italia SpA no lograron ponerse de acuerdo sobre un nuevo líder para la compañía telefónica en una reunión el jueves ante la candidatura para el puesto de dos ejecutivos, dijeron personas familiarizadas con el asunto.

El comité de nombramientos de cinco miembros se disolvió después de no poder elegir entre Alfredo Altavilla, ex responsable de Fiat-Chrysler Automobiles NV, y Luigi Gubitosi, administrador especial de la aerolínea en quiebra Alitalia SpA, dijeron las personas, que no quisieron revelar su identidad porque las deliberaciones son privadas.

Un tercer candidato, Rocco Sabelli, también fue considerado, pero decidió no presentarse al puesto, dijeron las personas. Un portavoz de Telecom Italia rechazó hacer comentarios.

Relevan a Genish, CEO de Telecom Italia, por choque con Elliott

La junta está teniendo dificultades para restablecer la estabilidad de la compañía desde que los aliados de la firma de inversión activista estadounidense Elliott Management Corp. destituyeran a Amos Genish del liderazgo de la empresa el martes después de que éste se resistió a su llamamiento para escindir la red de telefonía fija de Telecom Italia.

Una victoria tanto de Altavilla como de Gubitosi afianzaría la influencia de Elliott, que se hizo con el control de la junta en mayo para impulsar una reestructuración más profunda del antiguo monopolio en dificultades.

Altavilla es un directivo con experiencia global conocido por reducir costes en el negocio europeo de Fiat. Gubitosi es administrador especial de la aerolínea en bancarrota Alitalia SpA, a quien el Gobierno italiano le encomendó la tarea de rescatar lo que pueda del negocio de la compañía de bandera, subrayando su reputación como experto en cambios y su influencia en círculos políticos de Roma.