Los líderes de Alemania, España y Portugal pidieron a los votantes que no respalden a la líder de extrema derecha Marine Le Pen en las elecciones presidenciales de Francia el domingo, sin respaldar explícitamente a Emmanuel Macron.
“Una Francia que defienda nuestros valores comunes, en una Europa que reconocemos, libre y abierta al mundo, soberana, fuerte y generosa” esa es la Francia en juego el 24 de abril y “esperamos que los ciudadanos de la República francesa la elijan”, destacaron el canciller alemán, Olaf Scholz, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el primer ministro portugués Antonio Costa en una columna conjunta publicada en el diario Le Monde del jueves.
Los líderes europeos no suelen comentar sobre las elecciones o los asuntos internos de los estados miembros, pero esta vez el trío dijo que “la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas no es, para nosotros, una elección como cualquier otra. La elección a la que se enfrenta el pueblo francés es crucial para Francia y para todos nosotros en Europa”.
Describieron a Le Pen como una candidata “que abiertamente se pone del lado de quienes atacan nuestra libertad y democracia”.
Si bien la nacionalista de 53 años ha abandonado su plan para salir del bloque, quiere celebrar un referéndum que haga que la ley nacional prevalezca sobre las normas de la UE y restablezca los controles fronterizos permanentes en la zona de Schengen, desmantelando efectivamente el bloque desde adentro. También quiere desacelerar la cooperación con Alemania en materia de defensa.
Los lazos de Le Pen con Rusia también han sido objeto de un mayor escrutinio. En 2017, Le Pen viajó a Moscú para encontrarse Vladímir Putin. Hace doce años, su movimiento recibió un préstamo de una empresa rusa que aún está pagando, y hay muchos temores de que Le Pen se ponga del lado del presidente de Rusia si es elegida.
“Los populistas y la extrema derecha en todos nuestros países han hecho de Vladímir Putin un modelo ideológico y político, haciéndose eco de sus solicitudes nacionalistas”, escribieron Scholz, Costa y Sánchez. “No debemos olvidar esto, incluso si estos políticos ahora están tratando de distanciarse del agresor ruso”.
Un promedio de encuestas calculado por Bloomberg el 21 de abril mostró que Macron superaba a Le Pen con un 56,2% frente a un 43,8%. Eso le daría un margen de victoria más estrecho que hace cinco años. Si Le Pen obtiene más del 40% de los votos, es probable que ella salga empoderada mientras que él podría tener más dificultades para implementar su agenda de reformas, dependiendo de cómo resulten las elecciones parlamentarias en junio.
