El presidente Donald Trump intensificó sus amenazas contra la Organización Mundial de la Salud por su gestión de la pandemia de coronavirus, y dijo que recortaría permanentemente los fondos de EE.UU. si la organización no lleva a cabo reformas radicales.
En una carta de cuatro páginas que detalla sus muchas quejas a la OMS, Trump pidió al grupo que “demuestre su independencia de China”, reiterando una postura que lo llevó en abril a suspender temporalmente los fondos estadounidenses. El presidente publicó la carta el lunes por la noche en Twitter.
“Si la Organización Mundial de la Salud no se compromete a realizar mejoras significativas en los próximos 30 días, haré permanente la suspensión temporal de la financiación de Estados Unidos para la Organización Mundial de la Salud y reconsideraré nuestra inclusión en la organización”, escribió Trump al director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
En su tuit, Trump calificó la carta de “autoexplicativa”. No obstante, no proporcionó más información sobre las reformas que deseaba o qué cambios específicos podrían desbloquear el financiamiento.
Trump hizo pública la carta horas después de que el presidente chino, Xi Jinping, se dirigiera al órgano rector del grupo con sede en Ginebra, la Asamblea Mundial de la Salud, por vídeo y prometiese contribuir US$2.000 millones a la lucha contra la pandemia en los próximos dos años, a la vez que instó a una mayor cooperación internacional para vencer al virus, que ha infectado a 4,8 millones de personas en todo el mundo y se ha cobrado la vida de más de 318.000.
Trump anunció el 14 de abril que suspendería temporalmente la financiación de Estados Unidos a la OMS, acusando al grupo de apoyar demasiado a China.
Responsables de la Administración indicaron en ese momento que la congelación duraría 60 días y habría una revisión. Trump escribió en su carta que la revisión “confirmó muchas de las preocupaciones serias que planteé”.
Enumeró varios ejemplos de lo que dijo que eran declaraciones incorrectas de la OMS sobre el virus y sus elogios a la respuesta del Gobierno chino.
El presidente dijo que la agencia de las Naciones Unidas “ignoró sistemáticamente informes creíbles” del brote en Wuhan, China, en diciembre pasado, y luego declaró “tarde” una emergencia de salud pública a finales de enero. Dijo que la organización estaba “inexplicablemente en contra” de su decisión de frenar los viajes desde China en ese momento, a pesar de que “elogiaba vigorosamente las estrictas restricciones de viajes nacionales de China”.
La decisión de Trump de suspender el apoyo financiero a la OMS en medio de una pandemia mundial no tiene precedentes, y desencadenó un feroz debate dentro de su propia Administración sobre el alcance de la congelación de fondos.
Algunos funcionarios de la Administración Trump han argumentado que la OMS debería recibir mucho menos de los US$400 millones a US$500 millones que EE.UU. contribuye anualmente, y opinan que los fondos deberían ir a otras organizaciones centradas en la salud pública.
Pero otros han insinuado que la suspensión de fondos se podría usar para obligar a la OMS a introducir cambios en lo que la Administración considera un sesgo a favor de China. Esos funcionarios advierten que un recorte permanente podría perjudicar los esfuerzos para combatir el virus, así como enfermedades como el VIH, la poliomielitis y el sarampión.