La empresa Vale SA, de Brasil, el mayor productor de mineral de hierro del mundo, tiene previsto crecer pese a la contracción de los precios y a las desmejoradas perspectivas económicas del mayor consumidor.
quiere aumentar la capacidad anual de S11D, la mayor mina de mineral de hierro a cielo abierto, y la producción de pellets principalmente en su sistema sureste. Vale también tiene previsto desarrollar operaciones en Malasia y Omán.
Considerados en conjunto, los planes de expansión, presentados el martes por los principales ejecutivos en el día del inversor en Nueva York, daban la impresión de una repentina aceleración. Después de que el proyecto S11D de US$14.000 millones en la selva amazónica comenzó a realizar sus primeros envíos en 2017, Vale señaló que desaceleraría las inversiones mientras reducía gradualmente su enorme carga de deuda.
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Posteriormente, la campaña de China para reducir la contaminación atmosférica impulsó la demanda de mineral de hierro de mayor ley, el tipo que se extrae en S11D, el cual genera menos emisiones. La compañía ahora está produciendo mineral de hierro a niveles récord y la mayor parte del material se paga a precios más altos. La minera, con sede en Río de Janeiro, anunció el martes que planea elevar la producción de alta ley al 95 por ciento del total para el 2022, frente a cerca del 80 por ciento en la actualidad.
“El mineral de Vale se considera mineral verde, verde por las menores emisiones”, dijo el máximo responsable de Vale, Fabio Shvartsman, durante la presentación anual de la empresa con inversores. La producción de acero "es probablemente la fuente más importante de contaminación en toda China".
Vale dijo el martes que planea invertir US$770 millones en S11D y en la logística del norte que sirve al proyecto, además de US$820 millones adicionales en su sistema sureste. Su objetivo es aumentar la capacidad anual de S11D desde los 90 millones de toneladas previstos para 2020 a 100 millones dos años después, mientras que la capacidad de producción de pellets en el sureste aumentará en 20 millones de toneladas a largo plazo. También planea completar un aumento de 10 millones de toneladas a través de un proyecto de recuperación de presas de relaves en el norte de Brasil.
En lo que respecta a las operaciones de metales básicos, Vale también canta una melodía diferente. Schvartsman, que se mostraba inicialmente escéptico sobre el rendimiento de Vale del sector, ahora cree firmemente en la demanda futura de metales clave para la revolución de las baterías de automóviles eléctricos.
El máximo responsable anunció que planeaba seguir adelante con una inversión para mantener operativa la mina de níquel en dificultades de Nueva Caledonia a pesar haber dicho anteriormente que podría poner la unidad en cuidado y mantenimiento si no lograba encontrar un socio.
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Vale también dijo que elevará la producción anual de níquel a 313.000 toneladas en el corto plazo y 400.000 a medio plazo.
A fin de aprovechar las sinergias de infraestructura en sus operaciones canadienses, Vale dijo que ha alcanzado un acuerdo de sociedad conjunta con Glencore Plc. Asimismo, la compañía brasileña dijo que está trabajando en la construcción de un gran proyecto de cobre en Indonesia que podría sumar hasta 300.000 toneladas de suministro anual para el 2026.
ED
