En medio de los diferentes aumentos que sufrieron un sin fin de productos en distintos sectores, el incremento en el precio de los combustibles tendrá un fuerte impacto en la economía Argentina. Con el fin de ampliar este panorama, este medio se contactó con el presidente de la Confederación del Comercio de los Hidrocarburos de la República Argentina (CECHA) y titular de la Asociación Mendocina de Expendedores de Nafta y Afines (AMENA), Isabelino Rodríguez.
Por qué fueron necesarios tantos tantos aumentos del precio de la nafta
“Veníamos de una situación de retraso importante y era algo que estaba por explotar en cualquier momento”, comentó Isabelino Rodríguez. “Tuvimos, hace no mucho tiempo, una crisis importante donde por no poder pagar los barcos que se importaban de combustible, la gente se quedó sin poder cargar sus tanques durante varios días”, agregó.
Argentina tiene dependencia de importación de combustibles procesados
Posteriormente, Rodríguez planteó: “Argentina es superavitaria en lo que es exportación de hidrocarburos, pero tiene cierta dependencia en lo que se refiere a la importación de combustibles procesados”. Luego, manifestó que, “la capacidad de refinación que tiene la Argentina tiene un déficit que está entre un 20 o 30% y todo ese combustible se importa a valores internacionales”.
Ante el retraso en el precio de los barriles, las petroleras solían importar a pérdida
“En forma ficticia se había creado el famoso barril criollo de USD 58, resultando que las petroleras debían exportar el faltante de combustible que el sistema requiere a valores de USD 80 aproximadamente”, sostuvo el entrevistado, que después completó: “Había un spread negativo por el cual las petroleras importaban a pérdida y en definitiva lo terminaban pagando todos los argentinos vía subsidio a través de la inflación”.
Por otro lado, el presidente de AMENA señaló: “El combustible en la Argentina históricamente estaba en el orden del dólar 20 y ahora se producen situaciones particulares”. Sobre la misma línea, remarcó que, “hay aproximadamente 8 trimestres en los cuales el impuesto a los combustibles líquidos no ha sido pasado al valor del combustible y también hay en ciernes un aumento de los biocombustibles que forman parte de la mezcla que se hace al expenderse el combustible”.
“Dependiendo del valor del dólar y del combustible en el mundo, además del elemento tributario que no ha sido atendido hasta ahora y que el gobierno anterior lo dejó sin pasarlo, puede haber algún aumento más”, expresó Isabelino Rodríguez. No obstante, “Ya se ha producido una parte importante de este sendero de precios hacia la normalización del valor relativo en la economía que tiene el combustible”, concluyó.
