En función de analizar la nueva suba del dólar blue, que trepó 3,1% y alcanzó los $1.340, y el leve alivio por la inflación de junio, este medio se comunicó con el periodista de Editorial Perfil, Ariel Maciel, quien advirtió sobre la creciente tensión cambiaria y la falta de resultados del plan oficial para reactivar el consumo con ahorros en dólares.
“Lo que significa el dólar y todo este movimiento dentro de esta banda de flotación es también un poco cuáles son las órdenes que tiene el Gobierno en torno a esa flotación”, planteó Ariel Maciel. Y explicó que el objetivo original era que “el techo de la banda se toque recién para fin de año y que atraviese la parte electoral sin tantos movimientos".
Persiste el ruido por el atraso cambiario
Sin embargo, reconoció que, “empezaron a haber ruidos respecto del atraso cambiario que para muchos economistas y empresarios rige en el país”, y que se combinaron con “la demanda electoral, histórica, no solamente que depende de este Gobierno”.
Frente al riesgo de que la suba del dólar se traslade a precios, Maciel relativizó el impacto inmediato. “El Gobierno dice bueno, veremos qué pasa con estos movimientos porque es probable que el traslado no sea tan agresivo, el pass-through realmente no sea todo lo que pueda llegar a reacomodarse el dólar”, explicó.
Según desarrolló, “la propia caída de la demanda es una de las vías para contener los precios”, pero al mismo tiempo se observa un problema creciente: “El empresario empezó a decir ‘yo tengo que traer algo más de afuera, porque con eso voy a competir mejor en este escenario de consumo caído’”.
¿Exceso de empresas?
En ese escenario, el periodista advirtió que hay sectores con sobreoferta: “Algunos ya empiezan a entender que hoy sobran empresas entre la competencia que había de manera interna”.
También apuntó al avance del empleo informal como parte de la estrategia oficial para sostener el consumo. “Los productos argentinos son competitivos en tanto de cuánto vos los compares con aquellos que no pagan impuestos”, afirmó.