Una de las características más fáciles de identificar desde el comienzo del mandato de Javier Milei ha sido sin duda el manejo de las redes sociales que ejerce el Presidente, el cual instauró más de una vez alguna que otra polémica. En esta ocasión, preocupa el grado de violencia que se puede manifestar mediante ciertos comentarios y es por eso que Canal E se comunicó con Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional.
“100 días es bastante poco para transformar muchas cosas, pero lo que es cierto es que este Gobierno ha tenido la particularidad de generar algunas narrativas y algunas líneas de pensamiento respecto a políticas públicas que tienen que ver con los derechos humanos”, comentó Mariela Belski. “También a posicionamiento respecto a los derechos de las personas, que nos permiten un poco visualizar hacia dónde va el Gobierno durante los próximos 4 años”, agregó.
Violencia online
Posteriormente, Belski planteó: “Nos parece preocupante todo lo que tiene que ver con el nivel de violencia online y con un estilo de gobernar, específicamente de Javier Milei, que tiene que ver con generar un otro contra el que pelearse”. Luego, ejemplificó: “Un enemigo, demonizar, deslegitimar, confrontar y buscar siempre un responsable que sea otro para las cuestiones que no están funcionando en el Gobierno”.
Los periodistas son el grupo de enemigos a atacar
“La política tradicional funcionaba, antes los periodistas no eran enemigos, hoy los periodistas son ese grupo de enemigos a quien atacar y los actores también”, sostuvo la entrevistada. “La idea tiene que ver con deslegitimar a los periodistas y correrlos en términos de que su rol no es relevante”, complementó.
Cuál es el rol de Twitter
Por otro lado, la directora ejecutiva de Amnistía Internacional señaló: “Twitter es una red social muy de los periodistas, es una red social muy pequeña, la sociedad no está viendo twitter, lo que pasa es que lo que se dice en twitter después se replica en otros medios”. Sobre la misma línea, remarcó que, “acá el problema es que el que está agrediendo es el Presidente de la Nación y ahí cuando agrede el Presidente de la Nación, viene un problema en términos de libertad de expresión, porque lo que genera es silenciamiento y miedo”.
“El problema es que lo que pasa en twitter va a afuera de twitter, cuando estas cosas empiecen a pasar en la calle y el Presidente tenga una responsabilidad por haber incitado al odio, vamos a tener un problema serio”, expresó Belski. “Lo que nos preocupa mucho es que el Presidente rompió todos los límites y creó un plafón para poder hacer lo que él quiera”, concluyó.
