Mirar una película de ciencia ficción con un científico puede resultar interesante, aunque también un poco perturbador si el film no se ajusta a las leyes de la física. De eso se trata el ejercicio que proponen a estudiantes universitarios que cursan Física Elemental los profesores Jorge Shitu y Omar Benvenuto, quienes analizaron las escenas de Armageddon, Impacto profundo y Gravedad y hallaron “groseros errores”.
“Desde hace muchos años se viene revisando la enseñanza de las ciencias, en particular de Física. Uno de los cambios que se hicieron es intentar motivar al estudiante para que disfrute del aprendizaje y, en ese sentido, analizar una película de ciencia ficción entusiasma mucho a los alumnos”, afirmó Shitu, profesor de la Universidad Nacional de Río Negro y de la UTN.
El trabajo consiste en que los estudiantes analicen las películas y demuestren sus errores a través de la aplicación de las leyes y de cálculos que aprendieron durante el año. “En la práctica nadie te dice qué ley hay que usar para determinado fenómeno, por lo que desde ese punto de vista es un ejercicio muy interesante”, comentó el físico.
Sin pochoclos pero con ojo crítico, Shitu y el astrofísico Omar Benvenuto encontraron errores que hasta cambiarían los finales de las películas. Es así como en Armageddon un asteroide que se aproxima a la Tierra debe ser destruido con una bomba nuclear en un punto para partirlo en dos pedazos que se desviarían a 600 kilómetros del planeta. “Con la bomba nuclear más potente que se conoce la trayectoria original se desviaría sólo dos metros al llegar a la Tierra”, expuso Shitu.
Además, se puede observar a los astronautas caminando sobre el asteroide como si la fuerza de gravedad fuera igual que en la Tierra. “Si quisieras pararte en la superficie de un asteroide quizás lo lograrías, pero si das un salto muy fuerte no caés en el asteroide, salís disparado al espacio porque la gravedad es mínima”, explicó Benvenuto, docente de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la UNLP.
En Impacto profundo los equívocos son menos, pero no faltan. Esta vez, se destruye un cometa que pone en peligro a la Tierra. Pero los pedazos que llegan a la atmósfera no serían inocuos como plantea la película. “Cuando entran a la atmósfera –aclara Shitu– se calientan y transfieren energía a la atmósfera, que con una cuenta aproximada elevarían la temperatura del planeta unos 40º centígrados”.
En el reciente film Gravedad los astronautas interpretados por Sandra Bullock y George Clooney quedan varados en el espacio por una lluvia de basura espacial. “El error más interesante para trabajar en el aula es desmitificar la idea de que en el espacio exterior no hay gravedad. Y menos a 600 kilómetros de distancia de la Tierra, donde están los protagonistas. Allí la fuerza de gravedad se reduce un 9% del valor que tendría en la Tierra”, explicó Shitu.
Los errores tienen su costo. “Aprender implica un esfuerzo. Si te meten en la cabeza un concepto equivocado se debe hacer un doble esfuerzo al quitar primero el error que te metieron, y esto es perjudicial”, planteó Benvenuto.