Con el cese del aislamiento respiratorio selectivo para los últimos 12 pobladores de El Maitén que permanecían en confinamiento, el Ministerio de Salud de Chubut dará por concluido el brote epidémico de hantavirus considerado “el más grave de la historia sanitaria” local, con 11 muertes, 34 casos positivos y 142 personas en cuarentena.
“Mañana miércoles vamos a estar en Epuyén haciendo una jornada de revisión de hantavirus, un homenaje y reconocimiento a los equipos que trabajaron en la contingencia y a la comunidad que estuvo en aislamiento. Se van a juntar profesionales de las provincias afectadas por esta endemia (Río Negro, Neuquén y Chubut) y vamos a dar formalmente por finalizado el brote de hantavirus”, le dijo a PERFIL Adrián Pizzi, ministro de Salud de Chubut.
Además, durante la jornada se presentará el informe "Confirmación de la transmisión interhumana de hantavirus en brote Epuyén", a cargo de un equipo técnico de la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (Anlis-Malbrán), y una propuesta de "abordaje de hantavirus post brote" de expertos de la Secretaria de Salud de la Nación. El brote de hantavirus tuvo como epicentro Epuyén pero afectó también a las localidades chubutenses de Trevelin y El Maitén, y El Bolsón en Río Negro.
Hantavirus: Cómo prevenirlo y qué hacer frente a una posible transmisión
Todo comenzó el 2 de noviembre de 2018 durante el festejo de un cumpleaños de 15 en un salón. Hasta allí llegó como invitado un peón rural que había trabajado en un galpón cerrado donde habría contraído el virus hanta. Este hombre, identificado como Víctor D., fue el paciente cero o caso índice. La primera en contagiarse fue una adolescente de 14 años, que dos semanas después se convirtió en la primera víctima fatal.
El hantavirus se transmite habitualmente por el contacto con la orina, saliva y excretas de ratones colilargos infectados con dicho virus. Sin embargo, la ocurrencia de casos, de forma agrupada en un breve lapso de tiempo, sumado a la baja abundancia de roedores hizo pensar desde un principio que el mecanismo de transmisión era distinto, interhumano.
Ante esta posibilidad –y teniendo como antecedente lo ocurrido en el brote de 1996–, se estableció como medida “excepcional” el aislamiento selectivo obligatorio para todas las personas que habían estado en contacto con pacientes infectados. Finalmente el 19 de febrero el Instituto Anlis-Malbrán confirmó la hipótesis: el genotipo viral causante del brote efectivamente fue Andes Sur y hubo transmisión de persona a persona.
Hantavirus: dónde vive el ratón colilargo que transmite las distintas cepas
Además, la comparación con secuencias genómicas pertenecientes a casos no relacionados al brote y correspondientes a otras regiones endémicas del país, incluso de las del brote del año 1996 ocurrido en El Bolsón, permitió identificar cambios “exclusivos” en el genoma viral de la cepa involucrada en el brote de Epuyén, que podrían conferirle un mayor potencial de dispersión.
Tras el cese del brote, la localidad de Epuyén intenta volver poco a poco a la normalidad. Es que la principal actividad económica de la zona, el turismo, se vio seriamente afectada por la contingencia epidemiológica. Ayer se dio inició el ciclo lectivo en las tres escuelas primarias, las dos secundarias y la terciaria. “Fue muy bueno volver a clases, dar vuelta la página y mirar para adelante porque lo que vivimos fue muy duro, sobre todo en la propia municipalidad donde fallecieron dos empleados y otros dos estuvieron en terapia intensiva con coma inducido y todavía no volvieron de su licencia; hemos sufrido mucho y hemos aprendido mucho también”, dijo a Télam Antonio Reato, intendente de Epuyén.