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OPINIÓN

Ahora llegó Sora: cómo impacta la Inteligencia Artificial en un modelo educativo del siglo pasado

La nueva aplicación permite crear videos realistas. Para la educación se abre un mundo infinito de posibilidades, pero la escuela y la legislación aún no están preparados para ser responsables de la seguridad y el bienestar de los niños, niñas y adolescentes.

Sora, la revolución en las aulas
Sora, la revolución en las aulas | Imagen TV

Sora, desarrollada por OpenAI, puede generar videos realistas a partir de texto, lo que la convierte en una herramienta innovadora con un potencial ilimitado para la creación de contenido educativo audiovisual y representar de manera atractiva, inmersiva y personalizada conceptos, procesos, fenómenos o eventos históricos.

Permite la simulación de escenarios, la visualización de conceptos abstractos y la creación de experiencias de aprendizaje interactivas.

La revolución en las aulas puede ser total. Y no es futurista, es algo que ya está pasando con Chat GPT y sus clones.

Es necesario repensar la educación y su rol en la protección de niños, niñas y adolescentes en el contexto de la inteligencia artificial, brindando a los docentes la formación, recursos y el apoyo necesario para enfrentar estos nuevos retos.

En definitiva, la introducción de la herramienta Sora en las aulas nos obliga a reflexionar sobre el futuro de la educación, la responsabilidad que tenemos de proteger a las nuevas generaciones y la necesidad de encontrar un equilibrio entre las oportunidades y los riesgos que presenta esta tecnología.

Sin embargo, también existe el riesgo de que se use para crear deepfakes con fines malintencionados, difundir desinformación, manipular a la opinión pública o amplificar el ciberbullying, lo cual presenta un gran desafío y resalta la necesidad de un enfoque multidimensional que involucre educación, tecnología y políticas de prevención.

Trabajar en conjunto entre desarrolladores, usuarios, educadores y legisladores es clave para mitigar riesgos y garantizar que la tecnología avance de manera que beneficie a la sociedad en su conjunto, protegiéndonos de nuevas formas de violencias digitales.

Por su parte las instituciones educativas se encuentran en una encrucijada: deben aprovechar el potencial transformador de Sora para la enseñanza y el aprendizaje, sin perder de vista la responsabilidad de proteger a los estudiantes de los riesgos y peligros asociados a esta tecnología. Para navegar esta encrucijada de manera efectiva, es fundamental:

* Promover la educación y la sensibilización sobre el uso ético de la IA:

* Integrar la Ciudadanía Digital como contenido obligatorio.

* Ofrecer talleres y programas de formación sobre ciberseguridad, desinformación, identidad digital y uso creativo, crítico, seguro y responsable de la tecnología.

* Desarrollar recursos educativos interactivos que aborden la ciudadanía digital de manera lúdica y didáctica.

* Implementar medidas de seguridad.

* Implementar filtros y controles de seguridad avanzados para detectar y bloquear contenido dañino.

* Establecer políticas claras y mecanismos de reporte de abusos accesibles y eficientes.

* Fomentar la colaboración y el diálogo:

* Crear comités de ética digital integrados por estudiantes, docentes, padres y expertos.

* Promover el diálogo continuo entre todos los actores involucrados en la educación sobre los desafíos éticos de la IA.

Las escuelas también deben adaptarse al cambio y preparar a los estudiantes para un futuro cada vez más digitalizado y complejo.

El sistema educativo tradicional, arraigado en prácticas centenarias, ya no es suficiente para satisfacer las demandas y necesidades de niños, niñas y adolescentes de hoy.

Es necesario repensar la educación y su rol en la protección de los niños, niñas y adolescentes en el contexto de la inteligencia artificial. Esto implica enseñar al alumnado no solo habilidades tecnológicas, sino también habilidades éticas y de ciudadanía digital que les permitan enfrentar los desafíos en el ecosistema digital de manera segura y responsable. En definitiva, la introducción de SORA en las aulas plantea preguntas esenciales sobre la formación docente y su capacidad para abordar los desafíos éticos y tecnológicos. Necesitamos brindar a los educadores las herramientas y el apoyo necesarios para enfrentar estos nuevos retos.

 

Mariana Savid

(M.P. P:13-5610) Psicopedagoga y Profesora - Diplomada en Educar en la Cultura Digital, Neuroeducación para el aprendizaje, ESI y Mediación y Convivencia Escolar. Integrante de la ONG “Si nos reímos, nos reímos todxs”