En ambos países limítrofes las fronteras terrestres, fluviales y marítimas están cerradas.
COPACABANA. En Rio de Janeiro, uno de los destinos de Brasil a los que, por ahora, se puede acceder solo vía aérea. |
CEDOC PERFIL
J.E.
Según un informe elaborado por la Federación de Agencias de Viaje y Turismo (Faevyt) y remitido a sus asociados del interior del país, tanto Brasil como Uruguay mantienen algunas restricciones para el ingreso a través de sus fronteras, debido a la pandemia de Covid-19.
En el primer caso, Brasil, que tiene sus fronteras terrestres cerradas desde el pasado 19 de marzo, prorrogó por 30 días (hasta el 5 de noviembre) la prohibición de entrada vía terrestre, marítima o fluvial de extranjeros al país.
Con la medida, ningún turista puede entrar a Brasil por las fronteras que tiene con Argentina, Bolivia, Colombia, Guyana Francesa, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
El pasado 25 de septiembre, Brasil autorizó la llegada al país de ciudadanos foráneos siempre que lo hagan en avión.
Por su parte, en Uruguay, frente a versiones de posibles pasaportes sanitarios, el viceministro de Turismo aclaró que los turistas extranjeros no pueden ingresar al país y aún no hay fecha de apertura.
Solo pueden entrar ciudadanos uruguayos y personas enmarcadas dentro de nueve categorías muy puntuales, como extranjeros residentes o parientes de ciudadanos que vengan por motivos de reunificación familiar, entre otros.
Para los casos autorizados de ingreso, rige un protocolo que exige un hisopado de resultado negativo realizado con un máximo de 72 horas antes del viaje y luego es obligatorio hacer un aislamiento de 14 días. Se puede optar por realizarse un nuevo test PCR al séptimo día del período de aislamiento (el costo lo asume el viajero) y, en caso de dar negativo, se habilita a circular libremente por el territorio.
