Cautela en el peronismo cordobés ante la irrupción de Roberto Lavagna

La aparición del exministro de economía Roberto Lavagna en el radar político del PJ Federal sacudió la relativa calma con la que sus tres precandidatos oficializados, Sergio Massa, Juan Manuel Urtubey y Miguel Ángel Pichetto, venían jugando sus cartas en la interna del peronismo no kirchnerista. Sin embargo, su indefinición y las últimas declaraciones del economista no generaron la mejor impresión entre los referentes de Alternativa Federal, incluido el gobernador Juan Schiaretti y su entorno. Las objeciones no tienen tanto que ver con su capacidad técnica y política ni con su edad, tampoco con su llamativo look de sandalias con medias del que tanto se habló; sino más bien, con la manera en la que condiciona su eventual ingreso al espacio con candidatura propia y sin internas.

Sin salvadores. “Lavagna es una persona respetable, pero es uno más. Nadie es el salvador de la patria por sí solo. Roberto está equivocando el modo y la manera de intentar tener un lugar en Alternativa Federal”, aseguró un dirigente muy cercano al gobernador cordobés. Juan Schiaretti tiene una buena relación con el excan didato presidencial y estaría dispuesto a reunirse con él en las próximas semanas, si es que desde el entorno de Lavagna así lo piden. Desde el entorno del mandatario provincial admiten que respetan la trayectoria del economista y su paso por la función pública, pero advierten que “eso no significa que pueda arrogarse el derecho a candidatearse imponiendo condiciones de entrada”.

Espacio abierto. Schiaretti no desconoce que el exministro de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner ha jugado un rol importante en determinados momentos de la política argentina y que tiene la capacidad de seducir y captar el voto de parte del electorado vinculado a sectores moderados, de centro e independientes. Algo que sería muy conveniente para la oferta electoral que el espacio pretende mostrar en las elecciones, como una alternativa a la dualidad entre el macrismo y el kirchnerismo. Por este motivo, el gobernador ha sido más prudente y reservado que otros dirigentes del espacio para referirse a Lavagna, aunque sigue con atención cada uno de los pasos que el excandidato presidencial va dando en torno a una eventual candidatura.

“Alternativa Federal es un espacio amplio y abierto, que funciona con una mesa de conducción donde se sientan 11 gobernadores y los candidatos declarados. Si Lavagna plantea su intención de ingresar como parte del equipo seguramente será aceptado, pero debe hacerlo como uno más que blanquea sus intenciones de participar y sumar”, advirtió un dirigente de diálogo permanente con el gobernador cordobés. Aunque aún no se ha pronunciado públicamente sobre la cuestión, Schiaretti estaría más cercano a la posición de Massa y Urtubey que adelantaron su intención de dirimir las candidaturas del espacio en una elección primaria si no hay consenso para una fórmula de unidad entre todos los sectores que confluyen en el espacio. Por el momento, no parece haber demasiadas adhesiones dentro del Peronismo Federal a la teoría del “candidato de unidad nacional” planteada por Lavagna, pero tampoco están cerradas las puertas a las conversaciones que puedan terminar de definir la eventual postulación del exministro. Los encuentros que Lavagna pueda mantener con los dirigentes del espacio en las próximas semanas serán importantes para la decisión que finalmente tomará.