Tuvo una semana tranquila en las redes. Apareció poco y no quiso quedar como que estaba aprovechando el momento de la crisis que vive el gobierno nacional. Pero entre los suyos reconoció que hay que estar preparado para poner primera en cualquier momento. José Manuel de la Sota, de él se trata, sigue razonando de qué manera activar su sueño presidencial y no quedar en el intento. En estos días, algunas encuestas y relevamientos que hicieron medios nacionales no lo tuvieron en cuenta en la paleta de candidatos, pero el exgobernador ya dejó trascender que irá por un nuevo intento y hasta empezó a pensar en un ¿compañero de fórmula? A su entorno, le habría sugerido un nombre: el de Axel Kicillof. De la Sota cree que el PJ Federal no podrá entrar al conurbano bonaerense, por lo que necesitará del peronismo bonaerense y de alguna dosis de “kirchnerismo sin prontuario”, como le gusta comentar. “’El Gallego’ piensa que Cristina no va a ser candidata y por eso apuesta a un hombre cercano a ella para llegar a un acuerdo y competir con otra fórmula que podría estar compuesta por ‘El Chivo’ (Agustín) Rossi y Felipe (Solá)”. La semana que pasó puede poner a otros jugadores en cancha…
Alejarse de Accastello
La recomendación llegó hace un par de semanas a un par de gremios. En realidad, a una central que reúne a varios sindicatos y que está empezando a construir poder. El consejo, más o menos, decía “aléjense de (Eduardo) Accastello. Los va a quemar”. El argumento pasaba fundamentalmente porque la causa de los cuadernos podía complicar al exintendente de Villa María, sobre todo por lo que fue en su momento su relación con Julio De Vido y José López, hoy ambos detenidos. Bueno, parece que mucho caso los sindicalistas no le hicieron al consejo y se les ocurrió llevarlo a un acto el sábado pasado en Forja. “Después no digan que no les avise…”, habría dicho el buen hombre que efectuó el llamado. Pero no sería el único preocupado si la causa Eninder retoma su marcha. El otro que podría empezar a tener algún que otro dolor de cabeza es el concejal Marcelo Pascual, que llegó al legislativo municipal dentro del bloque ADN y ahora se encuentra solo con bancada unipersonal. El empresario fue otro de los que hizo obra pública dentro del polémico ente.
Se viene la pelea por las comisiones
El peronismo legislativo se trae entre manos otro proyecto que ya está dando mucho que hablar puertas adentro de la Unicameral. Después de la reforma electoral y el acuerdo con los intendentes, ahora los peronistas de la Legislatura van por la reducción de las comisiones, que hoy son más de 20 y que podrían pasar a 10, posiblemente antes de fin de año. Los motivos serían varios, pero el más importante podría ser la ausencia y falta de trabajo en varias, salvo escasas excepciones. Pero además, el otro inconveniente surgirá del propio PJ porque presidir las comisiones permite nombrar un par de asesores más. Por ejemplo, una de las posibilidades es que Deportes y Turismo, actualmente separadas, podrían ser una sola comisión; y Mariana Caserio (preside la segunda) habría pedido que se analice cuál de las dos tuvo mayor actividad durante el año para ella mantener la presidencia cuando sean fusionadas. Lo que resta saber es qué dirá Héctor “Pichi” Campana, que preside la deportiva. También están a la expectativa los pocos opositores que presiden algunas comisiones en la Unicameral.
El PJ capitalino cierra filas sobre Siciliano y Passerini
El peronismo de la capital cordobesa ya sabe que no habrá margen para un tercero: la pelea peronista en la ciudad será entre Miguel Siciliano y Daniel Passerini. De buena relación entre ambos, los dos ya tienen en cuenta que Alejandra Vigo habría decidido no competir en la capital. “Ella no va a jugar cuando sabe que el marido va por la reelección y pagarían un alto costo desde lo institucional”, comentó un peronista que conoce la rosca capitalina. En los movimientos de la semana, Siciliano sumó respaldo radical de la Agrupación Roja y Blanca, que ya había apoyado a otros peronistas en otras ocasiones.
