Marta Vidal no anduvo con vueltas y reconoció los graves errores que se presentaron el día de la votación en la provincia de Córdoba. La jueza electoral apuntó contra la empresa Ocasa, responsable de la logística y la carga de datos del escrutinio provisorio que fallaron el último domingo.
"Fue la crónica de una muerte anunciada", manifestó inicialmente en una entrevista para Cba24n. Vidal dijo que sabía que la empresa no tenía “experiencia electoral” y admitió que se la contrató por más de 2 mil millones de pesos porque cobraba un canon menor al propuesto por Correo Argentino. Recordó que la compañía Andreani se bajó del proceso de contratación.
Con “una empresa que nunca hizo elecciones, es muy difícil” que llegara a buen puerto con su obligación contractual.
“Nos enteramos en el último día que los técnicos operadores habían fallado, que muchos habían renunciado, que no se habían presentado. Trabajamos palmo a palmo con la empresa para que nada salga mal, pero sucedió”, reconoció la jueza electoral.
