En Córdoba, el último informe del Centro de Almaceneros ubicó la inflación de noviembre en 2,4% y marcó a la carne como el principal factor de presión dentro de Alimentos (con una suba mensual en torno al 10%), mientras el consumo en comercios de cercanía siguió en retroceso: las ventas minoristas cayeron 9,2% interanual en volumen y el acumulado del año muestra un derrumbe cercano al 22%.
En ese marco, el presidente de la entidad, Germán Romero entrevistado en Punto a Punto Radio (90.7) advirtió que la carne volvió a moverse al alza y describió un cuadro en el que los ingresos corren detrás de los precios: crece la necesidad de financiar la comida y se sostiene un piso crítico de hogares que directamente deben pedir ayuda para alimentarse
— ¿Están viendo una inflación creciente en alimentos? ¿Qué observan, sobre todo con la carne?
— Principalmente, la carne vacuna -uno de los productos de mayor peso estadístico dentro de la canasta alimentaria-no tiene freno por ahora: diciembre ya arrancó con otro 5% y, en casi dos meses, acumula un 25%. También volvieron a subir los aceites; el resto de los productos, en general, se mantuvo estable. Con este escenario se hace muy difícil volver a perforar el piso del 2% de inflación general. Lo más grave es que ese incremento mensual, en promedio, duplica a los aumentos salariales. Hay pérdida de poder adquisitivo y eso no lo recuperó la masa de trabajadores.
— ¿Esa pérdida se ve en el comercio de proximidad?
— Sí. Los comercios de proximidad que venden alimentos -almacenes, carnicerías, verdulerías, pollerías, panaderías y fiambrerías- en noviembre de 2025, comparado con noviembre de 2024, vendieron en volumen 9,1% menos. Y si comparamos enero–noviembre de 2025 con el mismo período de 2024, la caída en volumen es del 22,1%. Es una recesión que no vimos al menos en la última década o los últimos 15 años con características similares.
— En sus encuestas aparecen números muy duros: hogares que no cubren la canasta alimentaria y gente con hambre. ¿Cómo lo ven?
— Más allá de lo que percibimos en el comercio, las encuestas de hogares nos arrojan esos resultados. Evaluamos familias de distintos estratos y muchas veces ocurre que familias que teníamos como clase media pasan a engrosar la fila de pobres. Los números van subiendo de a poquito y, aunque los porcentajes suenen fríos, hablamos de familias, niños y adultos mayores. Cuando decimos que hay gente que no accede a la canasta alimentaria, significa esto: la canasta se basa en una tabla nutricional, con un abanico básico de nutrientes (un poco de carne, leche, queso). Pero hoy se compra lo que se puede con lo que se tiene: en vez de carne, papas; en vez de leche, fideos. Se buscan alimentos que llenen, aunque no alimenten igual.
— ¿Y qué pasa con quienes directamente tienen que pedir comida o recortar comidas?
— Un 19,8% tuvo que salir a pedir comida. Esto no se puede normalizar: hay familias que piden dinero a un familiar o amigo para comprar alimentos, otras piden para alimentarse y otras van a los negocios del barrio a ver si quedó un remanente de pan o de leche. Hoy ya no es algo aislado: pasan familias conocidas, vecinos, adultos, y se apoyan en la solidaridad para poder alimentar a sus chicos. Además, un 51,7% de las familias tuvo que suprimir alguna ingesta. Muchas meriendan tarde y de manera insuficiente porque la leche es escasa: una infusión con pan. Esto va a seguir ocurriendo si los salarios no alcanzan a la inflación mensual.
Tarifaria 2026 en Alta Gracia: 0% de aumento, exenciones y foco en servicios y obras
— Ustedes también midieron endeudamiento para comer. ¿Es cierto que casi 9 de cada 10 familias financian alimentos?
— Sí: 89,2%. Hay un 2%/2,3% que lo hace por conveniencia (promos, cuotas), pero el resto lo hace obligado. ¿Cómo lo financia? Con tarjeta de crédito (41,4%) y fiado (37,7%), más un porcentaje menor con dinero prestado. El fiado hoy es grave: muchas familias ya no pueden usar más la tarjeta porque pagaron el mínimo, quedaron con deudas y recurren al fiado por urgencia. Y, además, una parte importante del endeudamiento con tarjeta está asociada a la compra de alimentos: se compró, pero no se pudo pagar.
— Última: ¿cómo está hoy el abastecimiento y la distribución de alimentos en los almacenes?
— Con absoluta normalidad. En muchos casos, incluso sobra mercadería: llegan productos con fechas cercanas de vencimiento porque hubo más producción o stock y se quedó, ya que las ventas se frenaron. Abastecimiento hay; hoy hay mercadería de sobra. Sería bueno un equilibrio: que no falte mercadería, pero que las ventas estén “a flor de piel” para que se pueda seguir produciendo con normalidad.