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CóRDOBA
EL IMPACTO DE LA CAMPAÑA

Llaryora y un 2021 a la espera de más fondos de Nación y Provincia

Mimado por El Panal y de sintonía fina con Casa Rosada, el intendente arranca un buen año. Pedido por el Ferrourbano, gabinete en la mira y puesta en marcha de su propio ‘Amba’, los objetivos del arranque.

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El intendente Martín Llaryora aprovechó la última semana del año para volver a acelerar a fondo. Reunión con el senador Carlos Caserio, movimientos en el gabinete municipal con la llegada de Juan Domingo Viola al Ejecutivo y anuncio de las 418 metas del gobierno marcaron los últimos días de un 2020 al que el intendente le sacó el jugo en pandemia. Esto último, confirmado por lo que ocurrió en la primera parte del año con las reformas y los resortes que el jefe comunal le quitó al Suoem, en una disputa que parece controlada, aunque vivirá sus propios capítulos en el 2021. Sobre lo que viene, el verano siempre obliga a las gestiones municipales capitalinas a encender todas las alertas por el factor climático; pero este receso tiene otras particularidades propias de la nueva -y la vieja- normalidad: la llegada de una segunda ola de coronavirus y el comienzo de un año con elecciones intermedias, donde la ciudad será el epicentro de la campaña en Córdoba. En estos ejes se enfocan cerca del intendente para pensar en el futuro inmediato. Con un año clave para la gestión mirando el 2023, con fondos que esta vez llegarán desde las dos administraciones -Nación y Provincia- y la ciudad pensada como cabecera de la región metropolitana, el ‘Amba’ sobre el que ya se viene trabajando en el llaryorismo. El bendecido. En el PJ provincial cada vez son más los dirigentes que descartan cualquier opción 2023 que no sea Llaryora. De ese lote de nombres que había hasta hace un tiempo, todo se acotó solo al intendente a la hora de pensar en la sucesión del gobernador Juan Schiaretti. Y ese mismo razonamiento sobrevuela en los pasillos de Balcarce 50. En los despachos de Casa Rosada los llamados y la predisposición que los funcionarios nacionales empezaron a mostrar para con la gestión municipal capitalina es visible. “Todos miran acá”, contó de manera escueta un integrante del gabinete municipal a PERFIL CORDOBA. La misma fuente agregó que este vínculo y las fotos de Llaryora con funcionarios nacionales no altera la relación del intendente con El Panal. “Saben que tenemos que hacerlo porque no nos queda otra; necesitamos los fondos”, agregó el funcionario a este medio. El disparador vino porque esta semana en la Municipalidad se produjo un encuentro que no se había anunciado en la previa: Llaryora recibió al senador Carlos Caserio, hoy distante de Schiaretti, y uno de los que empezó a caminar con la mirada puesta en las Legislativas de este año. En el encuentro, el intendente aprovechó para pedir que el parlamentario, que tiene incidencia en el ministerio de Transporte de Nación, interceda por el proyecto del Ferrourbano, uno de los ejes de la campaña 2019. Y esta no fue la única referencia a este medio de transporte en la semana: un día antes, en la presentación del plan de metas, también se lo mencionó y por las dudas, desde la Provincia algunos se encargaron de recordar que la gestión de Schiaretti anunció una partida de 300 millones de pesos para el proyecto. Acerca del diálogo con Caserio, con quien había existido un contrapunto desde el Palacio 6 de Julio por el reparto de subsidios al transporte a mediados de año, poco trascendió en clave política. Pero aquellos que transitan los pasillos del Municipio sostienen que, si el diálogo político continúa, será con otros interlocutores designados por Llaryora y no con el intendente en el primer plano de la foto. Bacheo, cloacas y Circunvalación. “Se viene un año muy fuerte en obras. Hay fondos propios, sumados a los que van a llegar, y eso se va a ver en la primera parte del 2021”. La frase la disparó en los últimos días del 2020 un dirigente que conoce y mucho al intendente. Y la respaldó con la recaudación posterior a los aumentos y los recortes al Suoem. En tanto, acerca de lo que llegará de Nación, en el 2020 hubo una buena cantidad de visitas y supervisión de trabajos desde Obras Públicas, el ministerio que encabeza Gabriel Katopodis e integra Martín Gill. El primer arribo fue en plena pandemia y para supervisar la obra de cloacas en la planta de Bajo Grande, cuya inversión contempla una partida de 7.777 millones de pesos de Nación que incluye no solo la ampliación de la planta sino también culminar con los colectores. Obras que arrancó la gestión de Mauricio Macri pero que se estancó en 2018. Asimismo, en noviembre pasado, el propio Llaryora también agradeció al Gobierno nacional el aporte de 610 millones de pesos para obras de bacheo en Córdoba. En lo que fue uno de los varios contactos del 2020 del intendente con funcionarios nacionales de primera línea. El tercer eje de impacto electoral en materia de infraestructura no es una obra del Municipio, pero es una de las que más le sacará rédito el cordobesismo PJ: el tercer carril de Circunvalación. Schiaretti sigue de cerca los trabajos y en las recorridas se suman Llaryora y Alejandra Vigo, la diputada nacional que es una de las anotadas en el Centro Cívico para la boleta al Senado. La inversión acá de la Provincia para el total es de 3.200 millones de pesos, la intención es culminar -o avanzar al máximo, de acuerdo al contexto- en septiembre, previo a los comicios legislativos nacionales. Una foto que plasmará unidad o mostrará carriles separados en el PJ. Un verano intenso. “Todo el gabinete está observado” sintetizan en el Municipio. Los cambios que se produjeron en la última parte del año pusieron a todos en modo presión y pueden sumarse otras modificaciones. “La cuestión política en esto es central; cuando alguno creyó que empezaba a carretear, le vino un contrapeso como respuesta”, agregó la fuente. En tanto, y volviendo a la gestión, otra de las preocupaciones de Llaryora es la segunda ola de coronavirus para lo que ya se dispararon dos órdenes en distintos sentidos: control de la noche y refuerzo sanitario para trabajar en conjunto con la Provincia. La primera es central y la segunda lo tendrá con un alto perfil al secretario de Salud, Ariel Aleksandroff. | Cedoc Perfil

El intendente Martín Llaryora aprovechó la última semana del año para volver a acelerar a fondo. Reunión con el senador Carlos Caserio, movimientos en el gabinete municipal con la llegada de Juan Domingo Viola al Ejecutivo y anuncio de las 418 metas del gobierno marcaron los últimos días de un 2020 al que el intendente le sacó el jugo en pandemia. 

Esto último, confirmado por lo que ocurrió en la primera parte del año con las reformas y los resortes que el jefe comunal le quitó al Suoem, en una disputa que parece controlada, aunque vivirá sus propios capítulos en el 2021. 

Sobre lo que viene, el verano siempre obliga a las gestiones municipales capitalinas a encender todas las alertas por el factor climático; pero este receso tiene otras particularidades propias de la nueva -y la vieja- normalidad: la llegada de una segunda ola de coronavirus y el comienzo de un año con elecciones intermedias, donde la ciudad será el epicentro de la campaña en Córdoba. 

En estos ejes se enfocan cerca del intendente para pensar en el futuro inmediato. Con un año clave para la gestión mirando el 2023, con fondos que esta vez llegarán desde las dos administraciones -Nación y Provincia- y la ciudad pensada como cabecera de la región metropolitana, el ‘Amba’ sobre el que ya se viene trabajando en el llaryorismo. 

El bendecido. En el PJ provincial cada vez son más los dirigentes que descartan cualquier opción 2023 que no sea Llaryora. De ese lote de nombres que había hasta hace un tiempo, todo se acotó solo al intendente a la hora de pensar en la sucesión del gobernador Juan Schiaretti. 

Y ese mismo razonamiento sobrevuela en los pasillos de Balcarce 50. En los despachos de Casa Rosada los llamados y la predisposición que los funcionarios nacionales empezaron a mostrar para con la gestión municipal capitalina es visible. “Todos miran acá”, contó de manera escueta un integrante del gabinete municipal a PERFIL CORDOBA

La misma fuente agregó que este vínculo y las fotos de Llaryora con funcionarios nacionales no altera la relación del intendente con El Panal. “Saben que tenemos que hacerlo porque no nos queda otra; necesitamos los fondos”, agregó el funcionario a este medio. 

El disparador vino porque esta semana en la Municipalidad se produjo un encuentro que no se había anunciado en la previa: Llaryora recibió al senador Carlos Caserio, hoy distante de Schiaretti, y uno de los que empezó a caminar con la mirada puesta en las Legislativas de este año. 

En el encuentro, el intendente aprovechó para pedir que el parlamentario, que tiene incidencia en el ministerio de Transporte de Nación, interceda por el proyecto del Ferrourbano, uno de los ejes de la campaña 2019. Y esta no fue la única referencia a este medio de transporte en la semana: un día antes, en la presentación del plan de metas, también se lo mencionó y por las dudas, desde la Provincia algunos se encargaron de recordar que la gestión de Schiaretti anunció una partida de 300 millones de pesos para el proyecto. 

Acerca del diálogo con Caserio, con quien había existido un contrapunto desde el Palacio 6 de Julio por el reparto de subsidios al transporte a mediados de año, poco trascendió en clave política. Pero aquellos que transitan los pasillos del Municipio sostienen que, si el diálogo político continúa, será con otros interlocutores designados por Llaryora y no con el intendente en el primer plano de la foto. 

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Bacheo, cloacas y Circunvalación. “Se viene un año muy fuerte en obras. Hay fondos propios, sumados a los que van a llegar, y eso se va a ver en la primera parte del 2021”. La frase la disparó en los últimos días del 2020 un dirigente que conoce y mucho al intendente. Y la respaldó con la recaudación posterior a los aumentos y los recortes al Suoem. 

En tanto, acerca de lo que llegará de Nación, en el 2020 hubo una buena cantidad de visitas y supervisión de trabajos desde Obras Públicas, el ministerio que encabeza Gabriel Katopodis e integra Martín Gill. El primer arribo fue en plena pandemia y para supervisar la obra de cloacas en la planta de Bajo Grande, cuya inversión contempla una partida de 7.777 millones de pesos de Nación que incluye no solo la ampliación de la planta sino también culminar con los colectores. Obras que arrancó la gestión de Mauricio Macri pero que se estancó en 2018. 

Asimismo, en noviembre pasado, el propio Llaryora también agradeció al Gobierno nacional el aporte de 610 millones de pesos para obras de bacheo en Córdoba. En lo que fue uno de los varios contactos del 2020 del intendente con funcionarios nacionales de primera línea. 

El tercer eje de impacto electoral en materia de infraestructura no es una obra del Municipio, pero es una de las que más le sacará rédito el cordobesismo PJ: el tercer carril de Circunvalación. Schiaretti sigue de cerca los trabajos y en las recorridas se suman Llaryora y Alejandra Vigo, la diputada nacional que es una de las anotadas en el Centro Cívico para la boleta al Senado. 

La inversión acá de la Provincia para el total es de 3.200 millones de pesos, la intención es culminar -o avanzar al máximo, de acuerdo al contexto- en septiembre, previo a los comicios legislativos nacionales. Una foto que plasmará unidad o mostrará carriles separados en el PJ. 

Un verano intenso. “Todo el gabinete está observado” sintetizan en el Municipio. Los cambios que se produjeron en la última parte del año pusieron a todos en modo presión y pueden sumarse otras modificaciones. “La cuestión política en esto es central; cuando alguno creyó que empezaba a carretear, le vino un contrapeso como respuesta”, agregó la fuente. 

En tanto, y volviendo a la gestión, otra de las preocupaciones de Llaryora es la segunda ola de coronavirus para lo que ya se dispararon dos órdenes en distintos sentidos: control de la noche y refuerzo sanitario para trabajar en conjunto con la Provincia. La primera es central y la segunda lo tendrá con un alto perfil al secretario de Salud, Ariel Aleksandroff.