Ante la inminencia de los cierres por la segunda ola y el aumento sostenido de casos durante las últimas semanas, el gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, decidió que a partir del martes la provincia restringirá la circulación nocturna. La medida busca reducir la posibilidad de reuniones sociales, sobre todo, en lugares cerrados.
Según contó el medio local Los Andes, Suárez mantuvo una reunión con los intendentes de Mendoza para pautar el cierre de actividades desde las 0.30 a las 5.30 horas. La idea es que en esa franja horaria funcionen sólo servicios esenciales y de emergencia.
La medida busca desacoplar las fiestas clandestinas, una realidad que se ha disparado en provincias de todo el país, y también disminuir los encuentros nocturnos. El impacto que tenga el cierre en la circulación servirá para monitorear de qué manera avanza la segunda ola y también para darle descanso al sistema sanitario.
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La decisión del Ejecutivo por ahora no apunta al cierre de clases, restricciones del trabajo y otras actividades habilitadas. En ese marco, el gobierno provincial afirmó que se reducirá la capacidad para eventos del 70% al 50%, y también se establecerá un tope de 250 personas como máximo para reuniones multitudinarias.
El Ministro de Gobierno, Trabajo y Gobierno, Víctor Ibañez, aseguró que también aumentarán los controles policiales durante la madrugada, que además serán apoyadas por las fuerzas de seguridad municipales. "Son medidas que en ningún caso afectan el empleo y la actividad comercial de la provincia", aseveró Ibañez.
A su vez, el funcionario afirmó que “los que viajen de madrugada podrán circular con la misma documentación, si son esenciales”, con lo cual no tendrían inconvenientes.
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En esa línea, seguirán abiertas las actividades vinculadas al deporte, los cines, restaurantes y turismo, que durante el fin de semana largo de Pascuas fueron visitados por turistas de todo el país según consignó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). De acuerdo a esos datos, las 35 mil plazas disponibles por la provincia fueron ocupadas por visitantes.
De esta manera, el gobierno mendocino tomó la decisión de tomar medidas restrictivas luego del fin de semana largo y de esa manera, monitorear el avance de la segunda ola teniendo en cuenta la disponibilidad de camas.
De acuerdo a los datos del Monitor Público de Vacunación del Ministerio de Salud de la Nación, se distribuyeron a Mendoza un total de 228.150 dosis de las vacunas que llegaron al país, de las cuales fueron aplicadas 153.860 en total. De este número, 135.641 de los inmunizados pertenecen al grupo de aplicación con la primera dosis y 18.219 son quienes se vacunaron de forma completa.
G.I/MC
