Después de sólo 22 meses de existencia, el novedoso y multipremiado portal de noticias español Soitu.es bajó la persiana. Su director, Gumersindo Lafuente, se despidió de los lectores en un editorial -y a través de twitter- en el que explicó el cierre: se trata de la última víctima de la crisis financiera global y de la ausencia de un modelo rentable para los medios periodísticos.
Soitu.es vio la luz el 27 de diciembre de 2007, el día que asesinaron a la candidata presidencial paquistaní Benazir Bhutto. "Nacía con la energía necesaria para convertirse en un sitio de información útil, independiente, participativo y diferente. Queríamos contar historias de otra manera, utilizando a fondo las oportunidades de la Red", escribió Lafuente en su editorial.
En un mundo volcado a internet, donde cada vez se leen menos diarios impresos, el portal eligió lanzarse como un medio exclusivamente digital, sin soporte físico. No les fue mal: durante su breve existencia, además de informar en forma completa, vistosa e innovadora, Soitu.es cosechó varios galardones. La Online News Association, la mayor organización de periodismo digital en Estados Unidos, la distinguió por dos años consecutivos (2008 y 2009) con el premio a la excelencia en webs de habla no-inglesa.
Sin embargo, el modelo económico que hace que algunos periódicos aún sean rentables todavía no se trasladó a la red. "Las bases financieras sobre las que estaba edificado el crecimiento desaforado de los últimos quince años eran tan endebles como un castillo de naipes y miles de empresas y millones de puestos de trabajo se han esfumado en muy poco tiempo", sostuvo Lafuente. El resultado: diarios de papel que pierden cada vez más lectores y portales de noticias que pierden cada vez más dinero. En el medio, cientas de editores y dueños de medios de comunicación que buscan una solución rentable a ese dilema.
"Uno de los sectores más afectados por la crisis es el de la industria de los medios. Ya llevaba herida muchos años, ocultos sus males por el brillo pasajero de la burbuja económica, pero sufriendo en su estructura las consecuencias de su inadaptación al ecosistema de la Red. Ni en el ámbito del periodismo ni en el de la publicidad ni en el de su organización empresarial las grandes compañías de comunicación han tomado la iniciativa en Internet, y así han surgido en ese camino nuevos actores que ocupaban su espacio", comentó el director.
"En fin, gracias a todos. No sabemos qué nos encontraremos en el futuro, pero lo miramos de frente, con la ilusión de que hay muchas cosas por hacer y muchas buenas historias que contar. Y de alguna manera, las seguiremos contando en la Red", concluyó Lafuente. Sus lectores, desolados, lamentan la noticia y comentan desde la red social del diario. Acaso no había otra mejor despedida posible.
