Desde Belo Horizonte
Fernando Gago va subiendo, peldaño a peldaño, la escalera de sus sueños. Al Mundial de Alemania 2006 fue como hincha; de Sudáfrica 2010 se quedó afuera por poco, tras haber jugado 12 partidos en eliminatorias; y ahora, en Brasil 2014, está a cuatro partidos de alcanzar el objeto de deseo de todo futbolista, la Copa del Mundo.
“Cuando era chico y jugaba con mis amigos, fantaseaba con jugar un Mundial. Ni siquiera estaba en un club”, le cuenta a PERFIL el responsable en la Selección de iniciar el circuito futbolístico que adquiere máximo voltaje con Lionel Messi.
—¿Cuáles son tus primeros recuerdos de los mundiales?
—Me acuerdo bien a partir del de Estados Unidos ‘94. Del de Italia ‘90 recuerdo alguna revista, también.
—¿Y cómo fue estar en un Mundial como hincha?
—Viajé a Alemania 2006 con mi familia y mis amigos. Estuve en el primer partido, contra Costa de Marfil. Hace cuatro años, durante el de Sudáfrica, estuve un poco en Buenos Aires y otro poco en Madrid, porque jugaba en el Real. Vi el Mundial un poco en cada lado.
Lo miró por tevé. Gago fue una pieza importante en el equipo que se clasificó raspando a Sudáfrica 2010. Pero su inactividad en el Real Madrid en los meses previos al Mundial hizo que Diego Maradona le bajara el pulgar. Para que la historia no se repitiera, decidió regresar al país –primero estuvo en Vélez y ahora en Boca–, con la idea de estar bajo la mirada de Alejandro Sabella. Pese a ello, el sueño mundialista de Gago estuvo en riesgo otra vez, por una distensión en la rodilla izquierda que lo marginó de las canchas por más de un mes. Al final pudo desembarcar en Belo Horizonte junto a sus compañeros, algunos de ellos amigos desde los tiempos de la Sub 20 campeona del mundo en 2005 y de la Selección que ganó el oro en los Juegos Olímpicos 2008.
—¿Sabés quién es el que más pelotas le pasa a Messi?
—Si me lo preguntás es porque debo ser yo. Tenemos que tratar de que la pelota le llegue lo mejor posible. Siempre existe la tentación de dársela, es el mejor del mundo. Pero no hay que hacerlo siempre, sino cuando esté en mejores condiciones para recibir.
El socio. Nacido en Ciudadela el 10 de abril del ‘86, Gago debutó en la Mayor el 7 de febrero de 2007 en un escenario de lujo: el Stade de France, en un amistoso con victoria 1-0 sobre Francia. Desde entonces lleva jugados 52 partidos. Y se ha ganado un lugar clave en la consideración de Sabella y Messi, que lo quiere como socio en la zona de gestación.
En Cidade do Galo, el volante se sumó el jueves al discurso de la Pulga en favor de una Argentina que apueste al ataque. “Siempre vamos a correr riesgos porque somos un equipo ofensivo. Con Javier (Mascherano) tenemos que tratar de darle equilibrio”.
—¿Pero te gustaría que el equipo estuviera más balanceado?
—El equilibrio lo tenemos que mantener entre todos, no hay que analizar por separado las líneas del equipo. La clave es no perder la pelota, así no tendremos que correr para atrás y la presión será más alta. Mantener la tenencia hará más corto al equipo.
—¿Hasta dónde pueden llegar?
—Hay que ir partido a partido. Pero sólo me conformo con ganar el Mundial.
