Frente a la inminencia del fallo que le dará el Comité Ejecutivo de la AFA por las amenazas contra el arbitro Daniel Giménez en el entretiempo del partido frente a Boca, el presidente de Gimnasia y Esgrima de La Plata, Juan José Muñoz, afirmó:"No me quita el sueño ni me importa que me sancionen”.
Así, el dirigente minimizó anoche el impacto de la sanción que la AFA le impondrá al declarar que “todo esto me tiene sin cuidado porque estoy seguro de que soy inocente". Muñoz habló luego presentar su descargo por escrito ante las máximas autoridades futbolísticas.
Además, el titular de la entidad platense señaló que el castigo que le aplicarán es "sólo un daño moral" y destacó la importancia de no estar "imputado en la justicia". "No fui el responsable de la suspensión del partido. Eso lo determinó Giménez. De él prefiero no opinar. Que lo haga la gente", concluyó.
La estrategia del dirigente en el descargo fue tratar de desnudar algunas supuestas contradicciones entre la declaración del árbitro, tanto en sede judicial como en AFA, y la de otros testigos del episodio. El dirigente sostiene en el escrito que nunca amenazó a Giménez y que su ingreso al vestuario del Estadio Ciudad de La Plata fue en soledad y con autorización, y no en compañía de cuatro personas y por la fuerza como declaró el árbitro.
Recién esta noche se sabrá la sanción efectiva para Muñoz. Todo parece indicar que el castigo oscilará entre los ocho y doce meses para ejercer cargos representativos en AFA. Sin embargo, la sanción no le impedirá continuar como titular de Gimnasia.
La última vez que se sancionó a un directivo también fue mediante una suspensión: en 2004 el entonces presidente de Independiente, Andrés Ducatenzeiler, fue separado del cargo.
