La posibilidad de transportar mascotas en las cabinas de aviones de Aerolíneas Argentinas, anunciada por la presidenta Cristina Kirchner, sería la primera de una serie de novedades de la empresa estatal, de cara a un plan de modernización para buscar en cinco años revertir su déficit histórico. Según pudo saber PERFIL, ya se terminó de confeccionar el segundo plan quinquenal de la compañía, para 2014-2019, y ahora deberá ser aprobado por el Poder Ejecutivo para su envío al Congreso. Como el anterior plan, que abarcó el período 2010-2014, participó en su elaboración la consultora internacional Oliver Wyman, especializada en estrategias de negocios. Como también lo hizo en aquella oportunidad, Aerolíneas Argentinas-Austral se propone ahora salir del déficit operativo. Este año cerró con el balance negativo en US$ 402 millones. Este rojo fue señalado por sectores opositores como un síntoma de una mala gestión oficial. Sin embargo, la compañía se defiende atribuyéndolo a la devaluación, los mayores costos internos y externos en divisa versus los menores ingresos en dólares. Por caso, los vuelos internacionales, principal fuente de dólares de la empresa, decayeron en el último año 40% como consecuencia de la devaluación del peso de principios de 2014 y el cepo al dólar. De acuerdo con los cálculos que en la empresa que encabeza el dirigente camporista Mariano Recalde consideran conservadores, se llegará al superávit en 2019, al final del Plan Quinquenal. Esos números indican que para alcanzar ese equilibrio se requerirían unos 14 millones de pasajeros transportados por año. Los mandos medios y altos son más optimistas. Tras cerrar 2014 con nueve millones de pasajeros, creen que el equilibrio podría lograrse con 12 millones.
Modo avión. Según lo que pudo saber PERFIL, en el nuevo plan se continúa la renovación y ampliación de flota. Por el incremento de frecuencias, actualmente sólo quedan tres naves disponibles para cubrir equipos que queden fuera de operaciones o inmovilizadas por revisiones periódicas. Pero también Aerolíneas estudia ofrecer y cobrar nuevos servicios a los pasajeros. De acuerdo con los borradores, se podrían recaudar hasta $ 40 millones al año. Dentro de la modernización de servicios, además del transporte de mascotas, será anunciada la posibilidad de mantener equipos como notebooks, smartphones y reproductores en modo avión. Algo que no hace ahora, y está en estudio el cobro de ubicaciones diferenciadas en cada vuelo, más caras las más espaciosas o cercanas a salidas, por ejemplo. Con las nuevas aeronaves (tres a incorporarse en lo inmediato), Aerolíneas comenzará a brindar un servicio de conectividad con entretenimientos servidos en las naves. Algunos de ellos, en la medida en que se apruebe el Plan Quinquenal y la tecnología lo permita, comenzarán a ser pagos. Si en algún momento Cristina Kirchner defendió a Aerolíneas estatal diferenciándola de otras internacionales que cobran por las comidas de a bordo, ahora se prevé la venta de los servicios de comida de la clase “ejecutiva” a pasajeros de clase “económica”. Y otro foco que Aerolíneas tendrá en cuenta será el ahora casi inexplorado cobro de sobrepeso en los equipajes de los pasajeros. Mala noticia para “bagayeros”, pero buena para las cuentas públicas.
