A partir de hoy, las boletas de gas llegarán con una nueva suba que, en promedio, será del 24% con relación a los cuadros vigentes desde octubre pasado. Según los números dados a conocer ayer por el ministro de Energía, Juan José Aranguren, los más de cuatro millones de hogares del área metropolitana de Buenos Aires tendrán aumentos de entre un 20% y un 36%. Sin embargo, la gran mayoría de las facturas residenciales que lleguen entre mayo y septiembre próximo tendrán una suba que oscilará entre un 300% y 400% con relación al valor que pagaron en el invierno pasado. Esto es así porque se empezarán a aplicar los topes tarifarios aplicados por el Gobierno el año pasado tras el fallo de la Corte Suprema de Justicia que en agosto anuló el tarifazo dispuesto por el Ejecutivo en abril de 2016.
Lo que se desprende de las resoluciones del ente regulador del gas (Enargas) publicadas ayer en el Boletín Oficial –que entrarán en vigencia a partir de hoy– es que esta nueva suba de tarifas es muy similar en términos numéricos a la que dejó sin efecto el máximo tribunal. Es decir, en términos relativos, las boletas que empezarán a llegar en los próximos meses tendrán el mismo impacto que las del tarifazo pasado, con el atenuante de que estarán topeadas en un aumento máximo del 300% para los hogares de bajo consumo (R1-R23); 350% para los de medio (R31-R33); y 400% para los usuarios de mayor demanda (R34). ¿Cómo se explica un salto tan considerable justo cuando el Gobierno intenta reducir las señales inflacionarias? El timing político tampoco es el mejor. Ya con la campaña electoral lanzada en la que Cambiemos buscará apuntalar en las urnas el nivel de gobernabilidad, los hogares empezarán a recibir subas de hasta un 400% en relación con las boletas del mismo período del año anterior, salvo que el consumidor ahorre o no haga tanto frío como en 2016.
Lo que sucede es que el incremento anunciado ayer con Aranguren se comparará con las facturas del invierno pasado, que se calcularon utilizando los cuadros tarifarios establecidos por el ex ministro de Economía Axel Kicillof, en abril de 2014. Fue una de las consecuencias del fallo de la Corte, que dejó sin efecto lo actuado por Aranguren y repuso los valores que estaban vigentes durante el gobierno de Cristina Kirchner.
Ejemplo. Las facturas de gas que reciban la mayoría de los hogares en este invierno serán mucho más altas que las que se pagaron durante el mismo período del año pasado. Así lo confirmaron a PERFIL tres fuentes de distribuidoras privadas sin contacto entre sí. A modo de ejemplo, un hogar R22 bajo la órbita de Metrogas que en julio de 2016 consumió 70 metros cúbicos de gas y pagó 80 pesos, este año debería pagar cerca de $ 360 dado que el cargo variable en la factura aumentó un 450% de un período a otro. Pero como está vigente el tope de 350%, su factura final no superará los 280 pesos.