“Olvidemos todo esto de una vez, y vámonos a navegar al Paraguay”. Así canta Ricardo Mollo, guitarrista y líder de Divididos, uno de los clásicos de la banda. Jamás habrá imaginado el músico que un operador inmobiliario lo iba a citar para graficar la última tentación de los ahorristas argentinos: comprar viviendas en tierra guaraní, para subirse al despegue económico del país vecino y escapar de los controles y los vaivenes de la economía local.
Quienes tienen excedentes y buscan invertirlos ya no sólo miran Miami, histórico destino recomendado por brokers inmobiliarios, ni Punta del Este, ni tampoco Madrid, reciente oportunidad por la caída de los precios por la crisis en España. Hace un año y medio que allí donde arranca un proyecto inmobiliario en Asunción, hay entre 30% y 50% de compradores argentinos.
Así lo contaron a PERFIL diversos agentes que visitaron Buenos Aires la semana pasada para una megaexposición inmobiliaria, donde el comentario generalizado fue exactamente ése: la “invasión” de proyectos paraguayos para captar el ahorro argentino al que no hay blanqueo ni título oficial que pueda convencer de quedarse en el país.
“Hace un año que comenzaron a llegar en cantidad interesados en comprar metros cuadrados en Paraguay”, cuenta Analía Aquino, de Raíces Real Estate, que desarrolla proyectos tanto en la capital como en el interior paraguayo. “La situación argentina realmente nos anima más a buscar inversores”, describe por su parte Víctor Cálcena Duarte, director gerente del World Trade Center de Asunción, un megaemprendimiento de oficinas para grandes empresas en el llamado “eje corporativo” de la capital. Se trata de una zona donde siempre hubo viviendas de familias tradicionales, terrenos que ahora están siendo comprados por bancos, empresas y centros comerciales. En la avenida Santa Teresa, por ejemplo, hoy el metro cuadrado puede conseguirse desde US$ mil con una perspectiva de revaluación de hasta el 60% cuando el barrio esté funcionando en pleno dentro de al menos dos años. Está naciendo una especie de Puerto Madero paraguayo, lo resume Aquino. Otros proyectos comercializados en Buenos Aires son Villa Elisa, el Parque Industrial Panamericano y Torres de Altea.
En el segmento de oficinas, en tanto, hay unidades que pueden pagarse un poco más y que rinden en principio una renta del 10%. “Pero hay un recorrido importante respecto de los valores de otras ciudades similares de la región, por lo que sólo se espera que los márgenes mejoren en los próximos años”, indicó un operador de Capitalis Desarrollos Inmobiliarios.
A pesar del derrocamiento de Fernando Lugo, Paraguay se ha convertido en la “niña bonita” de la región en términos económicos. La Comisión Económica para América Latina estima que será el país con mayor crecimiento del PBI este año: 12,5%.
