Un swap es un acuerdo de intercambio financiero que establece un convenio entre dos partes para intercambiar obligaciones financieras como puede ser el pago de intereses sobre una deuda.
En el caso del swap entre Argentina y China el cual se activó durante el fin de semana, consiste en un canje de moneda en el que el BCRA deposita pesos en China y a cambio recibe yuanes. Esto le permitirá al organismo que conduce Miguel Pese ampliar las reservas brutas, es decir, las reservas totales del banco.
Dicho swap comprende el intercambio de monedas como refuerzo de reservas internacionales por 130 mil millones de yuanes renminbi y una activación especial por 35 mil millones de yuanes renminbi para compensar operaciones del mercado cambiario.
Swap: el BCRA confirmó la activación del acuerdo con China para reforzar reservas
La ampliación del uso del swap con el Central de China se había comenzado a negociar hace varios meses, por lo que en términos prácticos representa un alivio para las reservas internacionales del BCRA.
Por otra parte, si son convertidos en dólares y pasan a transformarse en "reservas netas", el país empieza a pagar intereses, es decir, el canje se transforma en un crédito.
“El swap de China es una especie de crédito que se hizo con el Banco de China y que requiere de una autorización de China para ser usado. Se activa con el permiso de China al tipo de cambio del día en el que se accede a esas divisas”, explicó a PERFIL la economista Natalia Motyl.
Swap: el BCRA confirmó la activación del acuerdo con China para reforzar reservas
“Una vez que se activan pasan a ser el poder de fuego del BCRA para hacer frente a una corrida cambiaria, que es el propósito inicial con el que firmaron este tipo de acuerdos. Lamentablemente, se van a utilizar para el intercambio bilateral con China y no hacer uso de los dólares”, agregó.
¿Qué implica que se haya activado?
“Van a caer las reservas que ya vienen por el piso. Sobre todo las de rápida disponibilidad, que es la cintura que tiene el BCRA para estabilizar el mercado cambiario rápidamente. Puede llegar a representar una mala señal a los mercados, ya que, lamentablemente, una caída de las reservas impacta, negativamente, sobre las expectativas. Ese swap estaba para hacer frente a una corrida contra el peso no para el pago de importaciones”, contestó la economista.
“Lo hicieron porque el yuan se estuvo devaluando en el último año frente al dólar. Prefieren mantener los dólares antes que el yuan. También es una mala señal porque las compras chinas se vuelven más baratas y eso podría acrecentar el déficit comercial en los próximos meses”, concluyó Motyl.
Es importante recordar que en la actualidad, China es el segundo mayor socio comercial de Argentina y uno de los principales destinos de las exportaciones argentinas. En 2021, las exportaciones totales nacionales hacia el gigante asiático fueron de US$ 6.164 millones valor FOB. En enero de 2022 fueron de US$ 330 millones, lo cual representó un crecimiento del 19% respecto a enero de 2021, según datos oficiales.
Ahora las empresas que exportan hacia China podrán hacerlo tanto en yuanes o en dólares, quitándole presión a la sangría de divisas del Banco Central.
El yuan repunta tras la reapertura en China
La moneda del gigante asiático subió a máximos de agosto pasado frente al dólar, este lunes, es decir, al día siguiente de que las fronteras del país se reabrieran para los viajeros internacionales.
La tasa de paridad central de la moneda china, según el Sistema de Comercio de Divisas, se elevó 647 puntos básicos este lunes 9 de enero, hasta 6,8265 yuanes por un dólar, el máximo desde el 22 de agosto de 2022.
Después de haber aplicado una política de covid cero durante tres años, las autoridades de China comenzaron a relajar en diciembre pasado las medidas de contención, abandonaron la práctica de pruebas PCR indiscriminadas, permitieron a pacientes asintomáticos y leves autoaislarse en casa, cancelaron las restricciones a la compra de antipiréticos e impulsaron la campaña de vacunación de la gente mayor.
SE / LR