En un contexto global marcado por tensiones geopolíticas, inflación persistente y señales de cambio en la política monetaria de Estados Unidos, el bitcoin volvió a captar la atención de los inversores. El precio de la criptomoneda líder experimenta un nuevo rally y llegó a los 118.000 dólares, impulsado por una combinación de factores económicos, financieros y tecnológicos que renuevan la tesis de sus seguidores más directos que lo ven como reserva de valor. Y se encamina casi sin esfuerzo a los 120 mil dólares.
Por caso, el pasado miércoles 9 de julio alcanzó su máximo histórico de u$s116.608,78, superando el pico previo del 22 de mayo (u$s111.999). Según fuentes del mercado, el nuevo récord fue impulsado por la firme demanda institucional y el interés en aumento de los grandes fondos. En tanto, ayer jueves 10 de julio, la criptomoneda subía más de 4%, mientras vuelven a escalar las tensiones arancelarias en EEUU.
El nuevo máximo del bitcoin contagió al resto del mercado y las altcoins muestran fuertes avances lideradas por Sui (+10,9%), Cardano (+8%) y Dogecoin (+6,6%). Mientras tanto, el Ethereum trepa 5,8% y roza los u$s3.000.
Por qué la presión bajista de las tasas de EE.UU es incentivo de suba para el Bitcoin
"Actualmente, la Reserva Federal (FED) presiona para reducir las tasas de interés del Tesoro de Estados Unidos. Y cuando eso sucede, los inversores abandonan los bonos del Tesoro y optan por otros activos. En estos escenarios, el Bitcoin ha atraído gran parte de esta inversión, de ahí la gran expectativa de un aumento significativo", explica Fabiano Días, director de Negocios Internacionales de Bitwage, plataforma dedicada al pago de honorarios en criptomonedas.
Aseguran que Trump “apuesta por el bitcoin y despierta al mercado cripto”
El optimismo no es infundado según algunos seguidores de la criptomoneda, dada la creciente adopción por parte de grandes empresas que incorporan bitcoin en sus reservas —las llamadas Bitcoin Treasure Companies—, así como el desarrollo de productos financieros como los ETF de bitcoin al contado, han dotado al mercado de una estructura más madura y accesible.

A esto se suma la revalorización del rol del dólar en la economía global, que cada vez enfrenta más cuestionamientos por parte de los inversores institucionales.
Un refugio frente a la volatilidad
La incertidumbre económica internacional ha llevado a muchos inversores a buscar coberturas ante una eventual devaluación de las monedas tradicionales. En este contexto, el bitcoin vuelve a consolidarse como una opción interesante.
“Bitcoin está demostrando, una vez más, su capacidad de posicionarse como una alternativa sólida ante la incertidumbre global. El interés institucional a través de los ETFs y la maduración de la industria cripto están impulsando una nueva ola de confianza en el mercado”, señala María Fernanda Juppet, CEO de CryptoMKT, una de las exchanges que opera en la región.
Para muchos analistas, esta tendencia no es coyuntural, sino estructural. “Bitcoin es fundamental para el ecosistema de las finanzas descentralizadas, más allá de su rol como reserva de valor, porque es la única moneda verdaderamente descentralizada. Su emisión limitada y su origen orgánico, fuera del control gubernamental, la convierten en el activo muy atractivo e ideal para sumar al sistema financiero, sin intermediarios, accesible y soberano”, explica Guido Bonacossa, especialista en desarrollo y crecimiento del ecosistema cripto.
Qué esperar del precio del Bitcoin y cuál es el techo
Desde Bitwage señalan que uno de los fundamentos más sólidos es su emisión limitada. “La tesis de Bitcoin sostiene que la devaluación de las monedas nacionales, las llamadas 'monedas fiduciarias', al ser de libre creación no tienen fondo y, por lo tanto, Bitcoin, que es una moneda de emisión controlada, no tiene techo”, sostiene Días.
Con este principio en mente, el mercado cripto ya no se movería sólo por especulación. La integración en carteras institucionales, la consolidación de infraestructura regulada y el avance de la tokenización de activos abren un nuevo paradigma financiero. En este escenario, el precio del bitcoin podría escalar mucho más si se confirma una política monetaria más laxa en Estados Unidos y se intensifica la adopción institucional.
América Latina no es ajena a este fenómeno. Según datos de Chainalysis, empresa especializada en el análisis de blockchain, Argentina está entre los 15 países con mayor adopción de criptomonedas a nivel mundial. La inflación estructural, los controles de capital y la alta penetración fintech explican por qué el bitcoin y otros criptoactivos se consolidan como herramientas de ahorro e inversión. “Se evidencia en la región un creciente acceso de inversionistas minoristas a plataformas seguras y reguladas, lo que está favoreciendo a una adopción más masiva y sostenida”, agrega Juppet.
La pregunta ya no es si el bitcoin subirá, sino cuánto, y hasta qué punto los inversores estarán preparados para el nuevo escenario monetario que se avecina.
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