La caída de la actividad industrial, de la construcción y el consumo pegó más fuerte en los partidos de la provincia de Buenos Aires, la jurisdicción de mayor incidencia electoral, donde el desempleo llegó a 12,3% en el primer trimestre de este año, un punto más que frente al mismo período del año pasado.
Los datos, además, se registran en un contexto de aumento de la cantidad de gente ocupada que demanda trabajo -un segundo empleo, por la pérdida de poder de compra de los salarios- y también la subocupación (quienes trabajan menos de lo que desean), que creció tres puntos contra el primer trimestre de 2019 en los partidos bonaerenses y llega al 13,1%.
Fuera del Gran Buenos Aires, Ushuaia y Río Grande en Tierra del Fuego tienen el dato más alto de desocupación: 13%, también por el impacto en las empresas armadoras de electrónicos.
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De la misma forma que en la periferia de Buenos Aires, en el Gran Rosario, zona más vinculada a la metalmecánica, la desocupación trepa a 11,7% de acuerdo con los datos difundidos por el INDEC, que en la imagen global marca que el desempleo llegó al 10,1% y volvió a los dos dígitos después de 13 años. Los alrededores de Córdoba, marcados por los despidos y suspensiones de la industria automotriz y alimenticia tienen un 11,3% de desocupación.
Todas las regiones que superan la cifra de desempleo general comparten características: son grandes centros urbanos o alrededores con un entramado manufacturero y donde también afecta la caída del comercio. Así, en Jujuy-Palpalá el desempleo trepa a 11,4%; en el Gran La Plata es de 10,8% y en Santa Rosa -La Pampa- y Tucumán, del 10,6% y al 10,5% en Concordia.
La subocupación, a nivel general, aumentó dos puntos, del 9,8% al 11,8% en el primer trimestre de este año. Allí Mendoza y San Juan, por ejemplo, que tienen tasas de desocupación por debajo del promedio, tienen más población con problemas de empleo, como también sucede en Salta y Posadas. “Ante una contracción de la actividad que no prometía ser tan elevada, muchas empresas parecen haber optado por evitar despidos dados los altos de costos de baja y posterior recontratación. El ajuste se dio vía caída de salarios reales (-11% interanual)”, señala la consultora LCG.
Elecciones. La provincia representa el 37% de los votos en las elecciones. Allí, la desocupación impacta más en las mujeres, con el 14%, medio punto más que en el primer trimestre del año anterior. Además, “la mayor incidencia y mayor crecimiento de la desocupación se da en menores de 29 años (mujeres: 23% y varones 18,5%)”, según remarca LCG. Y la proporción de desempleados que buscan empleo hace un año llega al 59% contra el 41% del primer trimestre de 2018.
“La expectativa neta de empleo (que mide el balance entre incorporaciones y despidos) recién muestra signos de recuperación (valores positivos) para el trimestre julio-septiembre 2019”, anticipa Matías Ghidini, General Manager de GhidiniRodil. “Con una elección presidencial cerrada y aún incierta, con final cerrado hasta noviembre, es muy poco probable que esta foto del mercado del trabajo mejore por el resto del corriente ejercicio”, agrega.
