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Clubes de barrio, en crisis: los aumentos de tarifas pueden llegar al 1000%

Por la situación económica, muchas personas abandonaron el club de barrio, o no pueden afrontar el pago de las cuotas mensuales. A eso se suma el aumento de las tarifas de luz y gas, que ya repercute en las actividades de las instituciones: algunas suspendieron clases por la noche y otras la asistencia a campeonatos. El aumento en tarifas de gas impacta directamente en el funcionamiento de las piletas climatizadas, a las que no solamente asisten socios, sino también deportistas de alto rendimiento.

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HURACÁN DE NECOCHEA. Limitó las competiciones. La pileta climatizada, protegida de los tarifazos por un amparo de 2019. | CEDOC

Por el aumento de las tarifas de la luz y el gas, el incremento en otros costos de mantenimiento y la deserción de socios por falta de recursos para afrontar las cuotas, los clubes de barrio también están en crisis.

Los clubes ya sufrieron aumentos de tarifas entre febrero y marzo, que alcanzan el 300%. Lo peor, estiman, vendrá si se quitan los subsidios, una medida que el Gobierno pospuso hasta junio. Si eso sucede, “el aumento de la tarifa eléctrica, según información que manejamos, sería del 1000%“, comentó Daniel Pacín, Secretario General del Club Franja de Oro y de la Confederación Argentina de Clubes. “En el país hay cerca de 20.000 clubes. Esto pone en emergencia a gran parte de ellos y al deporte social, que practican 8 millones de personas”.

La situación económica de las familias también impacta. “Los tres ingresos principales en un club se ven drásticamente disminuidos. Lo vemos en menos cobro de cuota social, la gente casi no consume en el buffet y casi no hay alquileres de salón para fiestas”, agregó.

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Para minimizar los gastos, algunos redujeron el tiempo de actividades nocturnas o la participación en campeonatos. “Es un Estado que nos está matando, que nos quiere dejar al borde de la ruina para allanar el camino para las sociedades anónimas deportivas que vienen por los clubes de barrio, no por la marca como es el caso de los clubes de fútbol, sino por nuestros terrenos, para hacer negocios inmobiliarios”, opinó Pacín.

 “Nuestro club está en Pompeya, una de las zonas con necesidades básicas insatisfechas más grandes de CABA. Una hora más que un chico esté en el club es una hora menos en la calle. Entonces, a muchos chicos que lamentablemente estaban predestinados a tener una vida mala, el club les cambia la vida”, concluyó.

El Club Huracán de Necochea redujo la cantidad de fechas de la liga de fútbol. “Se han bajado siete fechas, que son muchísimas en el fútbol. Había un torneo de básquet al que se viajaba en la zona; tampoco vamos a participar”, afirmó a este medio Guillermo Massa, presidente de esa institución.

El club tiene una medida cautelar por el aumento de las tarifas de gas de 2019. “La justicia suspendió esos aumentos hasta tanto no esté regulada la tarifa social para clubes de barrio. Es nuestro costo más importante, porque tenemos una pileta climatizada semiolímpica. Si no fuese por eso, estaría cerrada”, aclaró.

El aumento de las tarifas de gas también preocupa a los clubes de Santa Fe: en abril superaría el 200%. “Va a ser prácticamente imposible tener una pileta climatizada en Rosario salvo algunas raras excepciones. Eso puede repercutir en el 90% de los clubes que poseemos piletas en la provincia”, explicó a PERFIL Raúl Bianchi, presidente de la Federación santafecina de clubes y Secretario de la Asociación Rosarina.

 “Cuando se dan ese tipo de situaciones vemos la forma de acomodarnos. El gobierno nacional cortó la colonia de PAMI y nosotros la seguimos manteniendo sin cobrar a los jubilados, porque entendemos que tienen una jubilación mínima y que venir al club les hace bien”, explicó Juan Ignacio Bruera, secretario del Observatorio social y económico de clubes de barrio y prosecretario del club Franja de Oro. “Los clubes tienen más de 100 años de historia y esos 100 años de historia son con solidaridad. El Estado en su conjunto delegó la práctica deportiva en nuestras instituciones. No solamente cumplimos un rol desde lo deportivo, sino desde lo educativo y en lo que es inclusión social”, afirmó.

 

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 “Hasta el año pasado teníamos un programa de natación gratuita para chicos de escuelas públicas, en conjunto con el municipio y el Centro de Educación Física de San Martín. A nuestro club concurrieron más de 700 chicos”, comentó Graciela Lazzaroff, presidenta del Club Tres de Febrero, y de la Federación de entidades deportivas del partido de San Martín.

 “A partir de las últimas medidas económicas que restringieron todas las partidas, este proyecto se va a desarticular. Nos entristece mucho porque veíamos la alegría que tenían los chicos cuando venían a nadar a nuestro club, algunos de ellos a bañarse y cambiarse en un vestuario con agua caliente”.

El club Tres de Febrero, que tiene más de 90 años, trabaja en políticas de inclusión, como señalética en lengua de señas, o una guía de actividades y menú del buffet en braille.

Liliana es madre de un niño con TEA que asiste al club. “Es importante contar con estos lugares donde no solamente reciban bien a las personas que tengan necesidades especiales, sino también a su entorno. El espacio de recreación es tan importante como asistir a terapia”, afirmó.

Los deportistas de alto rendimiento también sufren el recorte. “Con respecto al tema de los viajes, sobre todo cuando son viajes muy largos, siempre se ha pedido ayuda del Estado. Algunos han colaborado más que otros”, agregó Lazzaroff.

“Si no le damos la posibilidad a nuestros deportistas, después no nos quejemos si en el medallero quedamos bastante atrás”, concluyó.

A Jorge Mario Olguín los clubes de barrio le permitieron hacerse conocido y convertirse en campeón mundial de fútbol en 1978. “Me vio una persona jugando y me llevó para Alvarado. Era muy chico, tenía 13 años, y debuté en primera”, le contó a PERFIL. Hoy sigue trabajando y aportando a los clubes en los que comenzó. “Ahí se ve a un montón de jugadores chicos que tienen virtudes increíbles que a veces no pueden llegar porque no tienen cómo”, agregó.

“Muchos salvaron al club de barrio de la crisis durante la pandemia. Pero la situación en este momento es tremenda, porque con todo lo que está pasando lamentablemente hay mucha gente que pierde el trabajo y tampoco puede ir a los clubes cuando no tienen un peso”, explicó el deportista.

“Este año empezaron muy pocos chicos. Otros nos avisaron que, por la situación económica, por no tener los botines y no tener con qué ir a jugar, tuvieron que dejar”, comentó el presidente del Mirador Sporting Club de San Luis, Juan Godoy. “Siempre fue un trabajo complicado para los clubes mantenerse, siempre la comunidad colabora, los vecinos ayudan, pero al estar tan limitados en lo económico, las ayudas se limitan también”, sintetizó.

Guadalupe Angiolini tiene 15 años y espera tener chances como deportista olímpica. Desde los 9 años entrena como nadadora en el club Huracán de Necochea. Participó y ganó diferentes campeonatos en representación de Argentina, y fue seleccionada para participar del torneo Pan Pacific, en Australia. La familia y el club trabajan para conseguir los fondos para que pueda viajar y volver a representar al país. “Hubo cambio de gobierno y para nuestra desgracia se ha cortado todo, para todos los deportistas”, explicó su mamá. “Somos nueve familias las que estamos abocadas a ver si pueden viajar para que ellos puedan seguir su carrera. Me parece que tener semejante semillero y que no puedan representar al país es una lástima”, finalizó.