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El déficit financiero del primer trimestre fue el más bajo de los últimos seis años

El déficit primario en marzo fue de $74.466 millones. Si se suman los intereses de la deuda el rojo financiero sumó $117.061 millones, y en el trimestre alcanzó a $184.408 millones.

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Ministerio de Economía | CEDOC

Las cuentas públicas nacionales registraron en marzo un déficit primario de $74.466 millones, y si se suman los intereses de la deuda -neto de intra sector público- por $42.595 millones, el desequilibrio financiero ascendió $117.061 millones, informó este martes el Ministerio de Economía.

Así, el primer trimestre del año verificó un resultado financiero deficitario en $184.408 millones (-0,5% del PBI), y la cartera económica destacó que es “el más bajo de los últimos seis años, producto en parte de la reestructuración de la deuda pública en moneda extranjera” que se realizó en septiembre de 2020.

El Palacio de Hacienda señaló que “el primer trimestre mostró una variación del gasto primario, impulsado principalmente por el gasto de capital, y un sendero de ingresos crecientes”.

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“La consolidación de una recuperación heterogénea pero sostenida durante el inicio del año ha permitido reforzar las finanzas públicas, permitiendo cerrar progresivamente la diferencia entre ingresos y gastos", remarcó.

En Economía explicaron que “la comparación de los resultados fiscales tanto en ingresos como en gastos comienzan a verse afectados por una base de comparación que incluye el inicio de las medidas de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) en  2020”.

El déficit financiero en el primer bimestre fue el más bajo de los últimos 6 años

En el caso de los ingresos, indicó que se observa “que los primeros 14 días  de marzo” respecto a igual lapso de 2020 “muestran una recuperación sostenida” en tanto que en en los gastos, “computando el efecto neto de los programas propios de asistencia a familias y empresas” en el marco de la cuarentena “se registra un incremento real de los mismos, lo que resulta compatible con el esfuerzo fiscal expansivo que se considera necesario para poder apoyar el proceso de recuperación”.

Ingresos Los ingresos totales del sector público nacional (SPN) ascendieron en marzo a $560.576 millones (+64,1% interanual).

El informe precisó que los ingresos tributarios crecieron 98% interanual, incididos por dos factores: la baja base de comparación por el impacto negativo del ASPO en la recaudación 2020, y la contribución de los tributos del comercio exterior asociados a la actividad económica en 2021.

“El ASPO afectó la base de comparación tanto de los recursos como de los gastos. Por ello, resulta adecuado comparar la evolución de los ingresos tributarios respecto a los días previos a su entrada en vigencia. En los primeros 14 días hábiles de marzo 2021, los ingresos tributarios del SPN crecían 48,1% interanual,  suba que representa un 3,8% interanual. en términos reales”, puntualizó.

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Los aportes y contribuciones a la seguridad social aumentaron 34,5% interanual “exhibiendo la mayor suba nominal en 12 meses” y “asi, se acumulan tres meses consecutivos de aceleración, dando cuenta de una recuperación gradual de los salarios y el empleo”, subrayó el comunicado.

Gastos. Por el lado de las erogaciones, Economía alegó que “las medidas de asistencia a las familias y empresas” por la pandemia “implicaron pagos extraordinarios en marzo del 2020 que aumentan la base de comparación”

“Por consiguiente, se calcula para los grandes conceptos las variaciones porcentuales descontando este efecto”, aclaró.

El gasto corriente verificó un alza de 29,8% interanual, que se eleva a alrededor de 44,3% interanual si se excluye el gasto COVID de la base 2020”. 

Los pagos de intereses crecieron $1.019 millones respecto a igual mes de 2020 (+2,4% interanual.), como resultado de la reestructuración de deuda.

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Las transferencias corrientes se incrementaron $53.328 millones (+29,6% internaual y +69,3% neto de gastos COVID).

“Aquéllas con destino al sector privado subieron +$60.695 millones. En este universo destacan las erogaciones del Ministerio de Desarrollo Social en concepto de los programas Potenciar Trabajo (+$14.532 millones, +210% interanual) y Políticas Alimentarias (+$3.648 millones, +48,7% interanual.), y la asistencia en materia de subsidios energéticos a CAMMESA; (+$9.000 millones; +42,9% i.a.) y el programa Plan Gas (+$6.184 millones)”, enumeró.

Por su parte, las erogaciones por prestaciones de la seguridad social sumaron $247.060 millones (+28,7% y 30,0% interanual neto de gastos COVID).

“El aumento en el pago de jubilaciones y pensiones contributivas se explica esencialmente por el impacto de la movilidad en las prestaciones de ANSES”, subrayó.

El gasto de capital fue el principal impulsor del gasto primario, registrando una suba de +$23.639 millones (+142,4% interanual). 

“Esta dinámica se explica por el incremento de la inversión de empresas públicas, además de mayores transferencias de capital a las provincias. Respecto a estas, se destacan la asistencia otorgada para el desarrollo de infraestructura para el saneamiento que realiza ENOHSA (+$2.961 millones), las transferencias para el sector Educación (+$1.745 millones), transferencias por $1.603 millones otorgadas al Ministerio de Obras Públicas y erogaciones correspondientes al desarrollo de viviendas (+$1.874 millones) en el marco del programa “Producción Integral y acceso al Hábitat”, especificó.