Luego de cuatro meses, la Asociación Civil Fores concluyó su informe solicitado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la eficacia del programa anticorrupción lanzado en 2018. En el documento, se evaluaron los problemas del programa e incluso se plantearon opciones para ayudar a los países.
El texto de Fores estuvo a cargo de un equipo liderado por su ex presidente, Marcelo de Jesús. La investigación se entregó a las autoridades del Fondo el pasado 5 de diciembre. El pedido de informe se hizo tras determinar que hubo “un empeoramiento en el indicador de corrupción del percentil 50 al percentil 25 de la distribución, el cual se asocia con una disminución en el crecimiento del PIB per cápita entre 0,4 y 0,5 puntos porcentuales”.
A partir de estos datos, se llegó a la conclusión de que "la baja calidad institucional y del Estado de Derecho inciden en una mayor corrupción que llevan a las consecuencias del Programa: estancamiento económico y exclusión social", según Clarín. Fores elaboró una fórmula que busca solucionar el problema planteado, el cual afirma que la falta de crecimiento y el estancamiento social generan mayor corrupción.
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De acuerdo a lo trascendido, el primer desafío se presenta ante la falta de indicadores para medir la corrupción en los Informes País. A modo de solución se subrayó la necesidad de conformar un indicador para medir el Estado de Derecho y las vulnerabilidades a través de tres sub indicadores: a) tres índices subjetivos (basados en opiniones) b) tres índices objetivos (estadísticas) y c) una estandarización o normalización del marco legal de cada país (por ejemplo, la Convención de la ONU contra la corrupción).
También, se plantearon los problemas que surgen cuando los funcionarios que se relacionan con el FMI se ven relacionados con causas de corrupción. Para dar ejemplo de estos casos, Fores hizo referencia a “Los Cuadernos de la Corrupción”, en Argentina, o el “Lava Jato” en Brasil. La Asociación propuso que se realice un mayor control de la contratación de funcionarios y empleados públicos en base al mérito similar a la que realiza el BID.
Por último, se resaltó que el FMI tiende a estudiar el diseño institucional de un país sin enfocarse en la calidad de las instituciones. Como ejemplo de ello el informe mencionó la necesidad de estudiar la calidad del Poder Judicial, el acceso a la información pública, la independencia de poderes, la calidad del empleo público, o las condenas en casos de corrupción.
RM / ds
