La ley de alquileres rige hace más de un año y el Índice para contratos de locación (ICL, por sus siglas), vuelve a marcar un fuerte aumento. Según la calculadora oficial, al 1 de noviembre, el incremento es del 49,53% interanual. Según un informe de Zonaprop, estiman que la suba total para noviembre será del 50%. La Federación de Inquilinos Nacional denuncia que las inmobiliarias hacen un golpe al mercado, y los corredores inmobiliarios señalan que la ley “no sirve”.
Quienes firmaron bajo la nueva Ley de Alquileres que rige desde julio de 2020 tienen contratos por tres años con aumento anual según el Índice para Contratos de Locación (ICL). Esta tasa la publica el Banco Central de la República Argentina en su web oficial, y se compone de dos variables: la inflación de acuerdo al Índice de precios al consumidor, y los salarios según la remuneración promedio de los trabajadores estables (Ripte). El BCRA expresó que es un índice que se actualiza diariamente.
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Inquilinos a favor de la ley
La Asociación de inquilinos agrupados destacó en dialogo con PERFIL que el incremento no es acumulativo, como sí lo era la normativa anterior. A modo de ejemplo, si el valor del alquiler al momento de ingresar es de $10.000 y al año aumenta un 50% se va a $15.000. Suponiendo que al siguiente año, el incremento también es del 50% este porcentaje se suma al 50% anual anterior, y finalmente se hace el cálculo sobre el valor base -$10.000- se le incrementa el 100% por lo que el alquiler quedaría en $20.000. El otro escenario, con la ley anterior y aumentos acumulativos, el inquilino terminaría pagando $22.500.
“De esta manera, el inquilino ahorra seis meses durante los tres años de alquiler. De hecho, Reporte Inmobiliario reconoció a los medios que los propietarios pierden dinero y que el índice va por detrás de la inflación”, afirmó a PERFIL Gervasio Muñoz, presidente de la Federación de Inquilinos Nacional.
En este orden, explicó que es una ley conveniente pero que falta regulación tanto en el valor inicial como en que se cumpla lo que establece la normativa. Por ello, “el golpe al mercado con valores iniciales altos y la poca oferta”. En portales online, se puede constatar que hay alquileres en dólares cuando no se pueden comprar divisas extranjeras y tampoco está permitido en la legislación.
“Es un momento complejo porque por primera vez luego de la dictadura militar, el estado nacional fija las actualizaciones y no hay aún organismo que controle, debería ser el Ministerio de Hábitat pero no lo hace”, sentenció el referente del movimiento.
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Corredores inmobiliarios en contra de la ley
Desde el sector inmobiliario sostienen que los propietarios ponen precios altos desde el vamos especulando con cargas impositivas y un solo aumento anual. Además, gran parte de la oferta que había fue retirada y se pasó a la venta.
“La realidad es que es perjudicial para ambas partes. Por un lado están pagando una actualización que nunca pagaron. Los propietarios tienen mayores presiones fiscales, entonces lo pasan a la venta y la poca oferta de inmuebles en alquiler hizo a su vez que los valores suban”, aseguró Mariano Malbrán, Presidente de Keymex y miembro de la Cámara de corredores inmobiliarios.
Al ser consultado por los seis meses de ahorro que señala la Federación de Inquilinos Nacional, afirmó que “es un error de concepto porque los aumentos por más que hubiesen sido fijados semestralmente nunca llegaban al 40%. Ahora es un 50%, al año siguiente es otro 50% y después otro 50% más. Se vuelve impagable”.
Las visiones son encontradas. Lo cierto es que un departamento dos ambientes en CABA está entre los $40.000 y $50.000 dependiendo zona y antigüedad de la propiedad; y que el ICL de actualización pisa el 50%.
cp