En medio de la intervención del Tesoro de Estados Unidos en el mercado cambiario para disciplinar al dólar, el Fondo Monetario Internacional (FMI) le insistió al gobierno de Javier Milei con la necesidad de acumular reservas internacionales, fortalecer la política monetaria y mantener el equilibrio de las cuentas fiscales.
A través del informe Perspectivas Económicas Regionales para el Hemisferio Oeste, el organismo multilateral destacó las reformas implementadas por la administración libertaria al argumentar que puso en marcha "un ambicioso paquete de reformas orientadas al mercado, con el objetivo de impulsar la productividad y el crecimiento".
El FMI recortó el crecimiento para la Argentina en 2025 a 4,5% y en 2026 al 4%
El FMI elogia el programa libertario
Bajo la perspectiva del prestamista de última instancia, las modificaciones se centraron en "eliminar barreras estructurales en el comercio, levantar regulaciones financieras, productivas y laborales restrictivas, y avanzar en cambios institucionales para mejorar la gobernanza".
En efecto, la entidad conducida por Kristalina Georgieva consideró que el programa económico de La Libertad Avanza se asienta sobre cinco pilares: liberalización del comercio, desregulación financiera, desregulación de los mercados de productos, modernización laboral y transformación del Estado.
"Tras la expiración de los poderes ejecutivos delegados en julio de 2025, el gobierno lanzó la iniciativa 'Cero Burocracia', destinada a reducir aún más la burocracia y recabar la opinión pública para seguir aliviando las cargas regulatorias. Se considera que los esfuerzos adicionales para reformar el mercado laboral y la política tributaria son fundamentales para abordar la informalidad y aumentar la productividad", reza el reporte del FMI.
En tal sentido, la entidad remarcó que de mantenerse y profundizarse los cambios del oficialismo, generarían "importantes beneficios a mediano plazo" ya que permitirían "abrir la economía argentina, mejorar la calidad y previsibilidad del régimen regulatorio y fiscal, y agilizar los procedimientos administrativos". "Estas políticas deberán complementarse con medidas orientadas a fortalecer la gobernanza y cerrar las brechas críticas en infraestructura y formación laboral", sumó.

Recorte de las proyecciones de crecimiento
A propósito de la marcha de la economía, el Fondo Monetario Internacional proyectó que la demanda interna impulsará el crecimiento en 2025, "a pesar de las estrictas políticas marcoeconómicas". De cara a 2026, anticiparon una moderación de la expansión en 2026 y una baja de la dinámica inflacionaria.
"Se proyecta que Argentina continúe avanzando en la reducción de la inflación en el marco de su programa de estabilización, a pesar de la reciente depreciación del peso. La inflación núcleo anual continúa disminuyendo gradualmente, mientras que la actividad económica se desaceleró en los últimos meses, en parte por los impactos y la incertidumbre asociados al proceso electoral".
Según el escenario base, el FMI recortó las proyecciones, pasando de alrededor del 4,5% este año al 4% en 2026, mientras que la inflación anual caería desde cerca del 28% a fines de 2025 hasta ubicarse entre 7% y 12% hacia diciembre del año próximo.
Desde la óptica del organismo multilateral, las estrictas políticas fiscales y monetarias aplicadas bajo el paraguas del Programa de Facilidades Extendidas (EFF, por sus siglas en inglés) contribuyeron "a la transición hacia un régimen cambiario más flexible y a la relajación de la mayoría de las restricciones cambiarias".
El FMI insiste con la acumulación de reservas
Más allá de los elogios a la gestión libertaria, el ente crediticio advirtió que "se requieren esfuerzos sostenidos para mantener la disciplina fiscal, fortalecer el marco de política monetaria y de gestión de liquidez, y reforzar las reservas internacionales, con el fin de garantizar un acceso estable y duradero a los mercados internacionales de capital".
No es la primera vez que el Fondo achaca con la importancia de apuntalar las tenencias extranjeras del Banco Central de la República Argentina (BCRA). De hecho, la acumulación de reservas es la única meta que el gobierno de Milei no pudo cumplir en la última revisión del acuerdo por US$ 20.000 millones firmado en abril de 2025, mientras que aprobó los objetivos fiscales y de emisión monetaria.
La falta de dólares en las arcas del BCRA y el Tesoro nacional mantiene en vilo a los tenedores de deuda argentina, ya que surgen dudas respecto a la capacidad de pago de vencimientos significativos como en enero y julio de 2026 por más de US$ 8.400 millones en total.
La incertidumbre de los acreedores se refleja en el nivel de riesgo país, que volvió a ubicarse por encima de los 1.000 puntos básicos, a pesar de la promesa de Estados Unidos del swap de US$ 20.000 millones y la intervención directa con venta de divisas.
De acuerdo a las estimaciones del sector privado, Argentina necesitaría que su riesgo país descendiera por debajo de los 500 puntos básicos para poder volver a financiarse en el mercado voluntario de deuda. Hoy, el índice elaborado por JP Morgan, que sigue la evolución de los bonos soberanos, se sitúa en 1.029 puntos, lo que significa que el Estado debería endeudarse a una tasa anual superior al 14%, algo que resulta inviable dadas las condiciones actuales.
MFN