Distendido en un seminario de la Cámara Española de Comercio de la República Argentina (CERA) en el hotel Alvear, donde se remarcó la paulatina salida de España de la crisis que atravesó en los últimos años (volvería a crecer cerca de 2% en 2015, tras recuperarse en torno al 1,3% este año, aunque con desempleo de casi 25%), el flamante embajador en el país, Estanislao de Grandes Pascual, habló con PERFIL sobre futuras inversiones de empresas de capital ibérico en el país. Además, se refirió a la polémica que tiene a la multinacional Telefónica en el centro de la escena por el proyecto de ley que regula las telecomunicaciones, recientemente postergado en su tratamiento en el
Congreso.
—Usted llegó a su cargo en febrero. Luego de la tensión por la expropiación de YPF, ¿en qué etapa está hoy el vínculo entre ambos países?
—Argentina es un país importante para España y las empresas españolas. A pesar de los momentos difíciles que ha tocado atravesar, han continuado a pesar de la situación económica, con perspectiva de futuro, más allá de la coyuntura.
—¿Prevé una nueva oleada de inversiones españolas en la Argentina?
—La inversión se va a profundizar una vez que se consolide la recuperación de la economía europea, y también ello empalme con el fortalecimiento de la recuperación económica de la Argentina. La capacidad de reacción del tejido económico es muy grande.
—En las últimas semanas, la empresa Telefónica, filial de la española homónima, ha estado en el centro de la tormenta, luego de que el proyecto de regulación de su sector fuera bautizado como Ley Telefónica. ¿Cómo lo toma?
—Son problemas empresariales que tienen que ver con la soberanía argentina de regular un sector estratégico como el de telecomunicaciones. Deseamos que la empresa española esté en la mejor situación, pero no intervenimos en las regulaciones legislativas de los sectores. Esperamos que el proyecto sea satisfactorio para el Gobierno y la empresa, que hace un importante aporte en inversión tecnológica.
De Grandes Pascual dijo esto luego de revelar en el cierre del seminario “España, hacia una economía competitiva”, que en el último viaje del ministro de Economía, Axel Kicillof, a Brisbane, Australia, a participar de la cumbre del Grupo de los 20, hubo una reunión bilateral con su par español, Luis de
Guindos.
Durante el seminario, Fernando Casado, director del Consejo Empresarial para la Competitividad, un nucleamiento de las mayores 15 multis ibéricas en pro de políticas de mediano plazo, habló de los desafíos de competitividad, en tanto José Carlos García de Quevedo, director de Invest in Spain-ICEX, “vendió” España como destino de inversiones y ejemplificó que el supermercadista Alfredo Coto acaba de comprar un edificio en Madrid por 20 millones de euros. El titular de la CERA, Guillermo Ambrogi, en tanto, celebró la convocatoria del evento.
Definen el pago del 4G
La primera adjudicación a Claro de una banda del espectro radioeléctrico para brindar comunicaciones 4G le puso presión a la especulación acerca de la forma de pago de los US$ 2.200 millones que el Gobierno espera recaudar.
Ni Claro, ni Telecom, ni Telefónica ni Airlink habrían cerrado aún una fórmula, pero en el sector crece un consenso en que la cifra en dólares contantes y sonantes podría ser razonable si se ubicara en el 50%, habida cuenta de la restricciones para conseguir la divisa. El Gobierno no estaría tan convencido, por las mismas razones: avidez de liquidez. Se definirá en 10 días, según fijó la CNC.
