Entre lunes y miércoles, el ministerio de Economía oficializará la nueva propuesta de canje de deuda, en medio de cruces entre los grupos de acreedores y el endurecimiento de los grupos encabezados por BlackRock y el ex abogado de Paul Singer.
Será la segunda oferta “oficial”, presentada en la Securities and Exchange Commission de Estados Unidos (SEC) y también en el Boletín Oficial. Promete ser la última oferta. El canje está abierto hasta el 24 de julio, lo que deja poco más de dos semanas para que los bonistas acepten la propuesta.
Uno de los grupos de bonistas, el ACC -Comité de Acreedores de la Argentina, en inglés-, organizado por el titular de Greylock, Hans Humes, y coordinado por el UBS y Mens Sana Advirsors, presentó una oferta que se acerca a la posición oficial, en un intento de fragmentar a los grupos más duros y sumar voluntades.
Los fondos más duros advirtieron que la rechazaran y esperan una oferta mejorada a último momento del Gobierno.
Según trascendió, el ministro de Economía, Martín Guzmán, presentará una oferta propia, que podría rondar los US$ 53 por cada 100 en valor presente neto, lo que acortaría la distancia también con los bonistas intransigentes, que no obstante plantean también que se preserven las condiciones de los bonos emitidos en el canje de 2005.
El nuevo monto representa 10 dólares más que la primera propuesta y está incluso por arriba de lo que en el Fondo Monetario Internacional consideran el límite para la sostenibilidad de la deuda.
Adhesión. Aún si todos los bonistas con los que negocia el Gobierno, duros o cercanos, aceptan, de todas formas, sólo representan el 40% de la deuda que se busca canjear, según indicaron desde el Ejecutivo a PERFIL. El paso siguiente será, entonces, que los bancos salgan a “vender” la propuesta a los tenedores minoristas que no se identificaron en la instancia de registro que abrió el Ministerio de Economía.
El ACC presentó una oferta el jueves que representa una mejora de US$ 39.000 millones. Pero los grupos Ad Hoc Bondholders (liderado por BlackRock) y el Exchange Bondholders rechazaron aceptar el acuerdo si la propuesta de Guzmán estaba en línea con esa oferta. Y advirtieron que podrían recurrir a la vía legal. Cuando presentó el grupo que asesora, Dennis Hranitzky, abogado de los bonistas que entraron a los canjes, señaló que no buscaba litigar, pero advirtió que conocía muchos abogados si quienes lo escuchaban preferían recurrir a los tribunales. Hranitzky, de Quinn Emmanuel, es el ex abogado de Paul Singer, titular del Fondo Buitre NML Capital, que encabezó los litigios contra la Argentina tras comprar la deuda en default de 2001.
Si el porcentaje de adhesión no llega al 75% que marcan las cláusulas de acción colectiva, la Argentina enfrentará juicios.
Las negociaciones se mantendrán hasta último momento. Además de los US$ 53 de VPN, la propuesta incluye, una quita de capital del 3%, el pago de cupones desde el año próximo, algo que también planteó la oferta de ACC. En caso de que haya un cupón atado a números de crecimiento, será bajo la auditoría del FMI, que es el paso siguiente en la agenda de Guzmán: renegociar el programa con el organismo para volver a tener acceso a los mercados.