El índice de precios al consumidor (IPC), principal indicador de la inflación en China, aumentó un 2,5 % interanual en junio, llegando a un máximo de dos años. En los últimos meses el IPC se vio afectado tanto por los rebrotes de la covid -los peores en China desde hace dos años, provocados por la variante ómicron- y las consiguientes restricciones impuestas por las autoridades como por el repunte de los precios internacionales de las materias primas.
El dato divulgado hoy por la Oficina Nacional de Estadística (ONE) superó lo esperado por los analistas, que pronosticaban un aumento del 2,4 % interanual para los precios al consumidor, si bien sí esperaban que el IPP subiera en torno al 6,1 % interanual, como finalmente sucedió.
El índice que más subió fue transporte
De acuerdo a la información oficial, los precios del transporte fueron los que mostraron la mayor suba con un 8,5 % interanual en junio, debido al encarecimiento del combustible. Asimismo, las prendas de vestir subieron un 0,6 %, los artículos de necesidad básica lo hicieron un 1,5 %, la educación lo hizo un 2,1 % y la atención médica un 0,7 %.
En cuanto a los precios de los alimentos, la carne de cerdo cayó a un ritmo más lento del 6% en junio, luego de un descenso del 21,1% en mayo. Sobre una base mensual, los precios de la carne crecieron 2.9%.
Por otro lado la ONE comunicó que el IPC aumentó un 2,5 % interanual en junio en las áreas urbanas, mientras que en las zonas rurales se incrementó en un 2,6 %.
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Se mantiene la presión a la inflación
Cabe señalar que a economía del país asiático mostró algunos signos tempranos de mejora en junio, a medida que disminuyeron los brotes y bloqueos de Covid. Pero los datos de alta frecuencia sugieren que la economía se contrajo en el segundo trimestre. Nuevos brotes de virus en partes de la provincia oriental de Anhui y las provincias costeras de Jiangsu, Fujian y Guangdong representan una amenaza creciente para la frágil recuperación.
De hecho, según la prensa estatal del país asiático, la inflación en China seguirá afrontando "presiones al alza" en el futuro debido a factores tanto domésticos como internacionales, lo que podría provocar que el Gobierno tome medidas para estabilizar los precios y garantizar suministros.
La opinión de la mayoría de los expertos es que en 2022 el IPC chino se mantendrá por debajo del límite del 3 % que se marcó el Gobierno debido, en parte, a la debilidad de la demanda doméstica.
El IPC había avanzado un 1,5 % en marzo, un 2,1 % en abril, y un 2,1 % en mayo.
RM / LR
