Por la búsqueda de más de US$ 10 mil millones de saldo comercial, los exportadores brasileños temen un endurecimiento en las restricciones sobre sus ventas a la Argentina. “Numéricamente la relación es buena, pero cuando vemos todo el conjunto, el comercio muestra una caída. La Argentina puso muchas trabas que perjudican el comercio, por decisiones políticas y no en lo comercial”, explicó a PERFIL el presidente de la Asociación de Comercio Exterior de Brasil (AEB), José Augusto de Castro, antes de llegar a Buenos Aires para participar del Día de la Exportación.
—¿Cómo ve el diálogo entre Cristina y Dilma?
—Las medidas que tomó la Argentina –comerciales, pero que son decisiones políticas– resienten el diálogo. El Mercosur como un todo se está quedando estancado mientras que el mundo busca integración con cadenas productivas. Los países se están quedando aislados y eso se debe solucionar con diálogo político.
—¿Qué esperan los empresarios brasileños de la Argentina en los próximos meses?
—Hay perspectivas de que la Argentina puede tomar todavía más medidas proteccionistas para llegar a su meta de superávit comercial, con las declaraciones juradas de importación o alguna nueva medida.
—Después del parate de Vale en Mendoza, ¿se estudian nuevas inversiones?
—El mercado argentino siempre fue muy importante para Brasil porque es un destino fuerte para las exportaciones de manufacturas industriales. En los últimos años hubo problemas para las empresas brasileñas que direccionaron inversión hacia la Argentina para ingresar los productos. Y si bien no están retirando masivamente inversiones del país, hay muchas que están frenando nuevas inversiones hasta que se defina el dólar, el envío de utilidades para las empresas. Para Brasil es importante porque, en los datos generales, por ejemplo, hasta julio cayó 44% su saldo comercial.
—¿Están funcionando las cadenas productivas que se quisieron armar entre la Argentina y Brasil?
—Prácticamente no hay integración. La idea era crear cadenas productivas. El único sector donde hay una cadena productiva es el automotor, y eso es porque depende más de las empresas que de los gobiernos.
—Sin el acuerdo automotor, ¿Brasil puede captar inversiones autopartistas por las que hoy pelea la Argentina?
—La producción en Brasil es más importante, y Brasil además tiene más posibilidades de importación. Hoy el acuerdo automotor no rige, pero no es importante el acuerdo porque con el libre comercio lo que importa es lo que decidan las terminales.