La Argentina no tendrá una crisis, las reservas no caerán tan fuerte hacia 2015, sino, incluso, entrarán dólares y en poco tiempo se podrá potenciar un crecimiento a largo plazo, en parte por los recursos del yacimiento no convencional de Vaca Muerta.
El diagnóstico no lo hizo ningún think tank del oficialismo. Por el contrario, fueron esos los principales ejes, con matices, de la disertación de los economistas Ricardo Arriazu, Eduardo Levy Yeyati y Lucas Llach sobre perspectivas de la Argentina que se llevó a cabo ayer en la última jornada del Coloquio de IDEA en Mar del Plata.
Habituados a recibir malos pronósticos, los empresarios escucharon con cierto desconcierto a Levy Yeyati, director de la consultora Elypsis, cuando sentenció: “No habrá más crisis en la Argentina”. Luego apuntó que es “muy baja, casi nula” la posibilidad de una crisis brusca como la que ha tenido el país en su historia. Lo explica porque toda la región ha aprendido de las debacles macro de los 90 y las condiciones externas cambiaron.
Pero también porque en el próximo bienio no ve una caída de las reservas tan fuerte como otros. Sus cálculos arrojan que el Banco Central llegará a 2015 con más de US$ 20 mil millones, porque la caída en un punto se revertirá por la mejora de expectativas cuanto más cerca quede el cambio de administración. “Van a entrar inversiones que buscarán posicionarse de manera táctica de cara a 2016”, aventuró.
En el corto plazo, en tanto, prevé “un escenario intermedio” entre la profundización y el cambio virtuoso en el Gobierno, con algunos cambios graduales, en la política monetaria. Según él, la tasa de devaluación rondará el 30-35% con una inflación estable en 24% este año y 25% aproximadamente en 2014, que “va a llevar al Gobierno a reemplazar los planes de desdoblamiento cambiario”. Pero al mismo tiempo, sin crisis, prevé estancamiento del crecimiento (1% para 2014), estancamiento del empleo, con ajuste de salario y menos consumo.
Arriazu se mostró optimista del impacto que puede tener la explotación del yacimiento de gas no convencional de Vaca Muerta en Neuquén. “Es un 11% del total de las reservas mundiales de combustible no convencional, y podemos valuarlo en 384 años de consumo de hidrocarburos de la Argentina”, subrayó. “Todos debemos estudiar este tema y les sugiero a mis clientes empresarios que hagan proyectos para contemplar qué harían si esto cambia la infraestructura del país”, apuntó.
El profesor de la Universidad Di Tella, Lucas Llach, que saludó a su padre sentado en el auditorio, aseguró que tiene un “optimismo bilardista” con el mediano plazo, y dijo que el país “llegará bien a 2015”.
“En la orilla, habrá que hacer deberes pero, una vez hechos, soy muy optimista en el largo plazo”, manifestó.
Aseguró que es sencillo arreglar el Indec y conseguir crédito para eliminar la restricción externa, puso una luz amarilla en cuánto puede costar resolver el problema fiscal, y aseguró que los mayores desafíos para quien llegue en 2015 será bajar gradualmente la inflación, subir las tarifas y volver a la unificación cambiaria. “Con brecha cambiaria no hay inversión”, sostuvo.
Siguen negociaciones
Con perfil bajo, en Mar del Plata compartieron el Coloquio Patricio Farcuh, CEO del Grupo Ruho, que provee servicios en recursos humanos; y Gabriel Beltramino, gerente general de OCA, la mayor empresa privada de correos del país. En total reserva, como publicó PERFIL hace semanas, la compañía de Farcuh negocia comprar la firma que lidera Beltramino y que comandó en su tiempo Alfredo Yabrán. En el mercado se asegura que la operación avanza.