El secretario adjunto del gremio de los Camioneros, Pablo Moyano, advirtió ayer a los empresarios del sector que "el pedido de aumento salarial del 25 por ciento lo darán por las buenas o por las malas". Moyano dijo que "estamos convencidos que los empresarios nos pueden dar el aumento del 25 por ciento y por las buenas o por las malas vamos a llegar a esa cifra".
El próximo jueves a las 14, trabajadores y empresarios se sentarán nuevamente a la mesa de las negociaciones salariales en el marco de las paritarias. Días atrás, los empresarios del autotransporte de cargas habían considerado "imposible" alcanzar un acuerdo salarial con el sindicato de camioneros, debido a que "las posibilidades económicas del sector no están para hacer ningún tipo de modificación" en la escala de haberes de la actividad.
Así lo había señalado el director de Asuntos Laborales de la Federación de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), Lucio Zemborain, quien subrayó que la patronal llevó el miércoles último a la primera reunión de paritarias en el Ministerio de Trabajo "una posición muy firme, fundada en la realidad económica que está atravesando el sector".
Explicó a radio Cultura que "esta situación se contrapone con el reclamo sindical de un incremento de 25 por ciento, y hace imposible pensar en un próximo acuerdo".
"La verdad es que no nos pusimos a elucubrar previamente qué porcentaje nos iban a requerir, en función de que las posibilidades económicas del sector no están para hacer ningún tipo de modificación", afirmó el dirigente empresario.
Ante la pregunta de si la postura de la patronal entonces es no otorgar ningún aumento, Zemborain dijo que "en este momento sí".
Remarcó que en los últimos seis años el sector empresario "otorgó aumentos salariales por encima de la media de otras actividades, colocando las remuneraciones de los trabajadores camioneros entre los mejores pagos del país, cosa que reconoce el propio sindicato".
Así, puntualizó que si los empresarios "ahora no pueden otorgar aumentos salariales, es sencillamente porque la rentabilidad y la ecuación económico financiera de las empresas lo impide". "Tratemos de sobrellevar juntos, empresarios y trabajadores, este difícil momento, para preservar los puestos de trabajo y la continuidad de las empresas", advirtió Zemborain, quien consideró que hablar de medidas de fuerza desde el sector gremial "es la práctica usual de este tipo de negociaciones".
Indicó que "el arma que tienen los trabajadores, y las organizaciones sindicales que los representan, es adoptar medidas de fuerza cuando la posición del sector empresario no los complace". "Lo que pasa es que la realidad económica no nos deja la posibilidad de hacer una mejora económica a pesar de que haya una, dos o mil medidas de fuerza", afirmó el dirigente empresario.
Aseguró que una presión de este tipo "no va a cambiar el ánimo de los empresarios, que tienen una posición unánime en función de las dificultades económicas que están atravesando".
Fuente: DYN