La industria moderó su caída en mayo frente al 30% que marcó la Unión Industrial Argentina para abril a partir de la vuelta de la actividad en algunos sectores, pero de todas formas las bajas estuvieron en el orden del 20%.
El Índice de Producción Industrial (IPI) de FIEL registró en mayo un retroceso interanual de 19.9%, aún con el reinicio de actividades en algunas plantas industriales, la adecuación a los protocolos sanitarios y a nuevos planes de producción. De acuerdo con la consultora de Orlando J. Ferreres (OJF), la contracción fue de 18,1% al comparar con igual mes del año pasado, acumulando para los primeros cinco meses del año una baja de 12,3% anual.
“En el contexto de pandemia, se observaron importantes caídas interanuales en los diversos sectores. La contracción de la producción automotriz, de minerales no metálicos, siderúrgica y de la refinación de combustibles, lideraron la caída”, detalla FIEL. Del otro lado, en alimentos e insumos químicos y plásticos volvieron a registrarse actividades con mejora interanual.
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“Durante mayo, a diferencia de lo que ocurrió en abril, todos los sectores tuvieron producción, y aunque la comparación interanual sigue mostrando un verdadero desplome del nivel de actividad, se observa una menor caída mientras que la medición desestacionalizada muestra una mejora sustancial respecto del piso del cuarto mes del año”, detalló el análisis de Ferreres.
“No esperamos a partir de esto una recuperación de la industria, ya que la expansión mensual responde en buena medida al levantamiento de las restricciones en varios sectores”. Así, para los próximos meses esperan “bajos niveles de producción respecto de los registrados el año pasado, aunque ya sin bajas como las de abril”, a menos que un eventual empeoramiento de la situación sanitaria lleve a la reimposición de restricciones a la circulación de personas y a la producción industrial, advierte OJF.
De acuerdo con FIEL, los indicadores que permitían anticipar un freno en la caída se han deteriorado. “Contribuirá a contener la caída de la producción industrial asegurar el acceso a insumos por parte de las terminales del sector automotriz, propiciar la recuperación de la construcción privada y mejorar el ambiente para las inversiones privadas” señala y coinciden en que el eventual retroceso en la fase del aislamiento social y obligatorio en la región del AMBA que afecte actividades industriales exceptuadas demorará más allá de julio un rebote de la actividad.
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Sectores. En los primeros cinco meses del año y en la comparación interanual, únicamente la rama de insumos químicos y plásticos acumula crecimiento (1,9%). Los restantes sectores de muestran un retroceso en el periodo enero-mayo respecto al mismo periodo de 2019 comenzando con la producción de alimentos y bebidas que cae 0,5%, seguido de la producción de insumos textiles (-2,2%), la producción de papel y celulosa (-4,3%) y el proceso de petróleo (-10,5%). Entre los más golpeados siguen la metalmecánica (-11,6%), los despachos de cigarrillos (-20,7%), la siderurgia (-30,1%), los minerales no metálicos (-36,3%), y la producción automotriz (-49,5%).
En la comparación con abril, la actividad recuperó 18.9%, que corregido por factores estacionales significó un retroceso del 3.7%, agrega FIEL. En lo que va del año, la producción industrial acumuló una caída del 10,6% en cinco meses, en la comparación con el mismo periodo del año anterior. Para Ferreres, la medición desestacionalizada registró un crecimiento mensual de 22,4%.
PV
