Entre hoy y mañana, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), dirigida por Claudio Moroni, dará a conocer los datos de la recaudación impositiva del mes. Para algunos analistas, estos números confirmarán que la crisis ya afectó a nuestro país y comenzó a desacelerar la economía.
Los ingresos de octubre crecieron un 37,5% respecto del año pasado, pero se espera que la de noviembre sea de $23.000 millones, un 25% mayor que la de 2007, pero es menor a la medición anterior y representa la tasa de crecimiento más baja del año, según consignó el diario El Cronista.
La desaceleración del crecimiento se debe en mayor parte a la situación internacional, considerado que las retenciones a las exportaciones son el 14% de la recaudación. Los precios de los commodities bajaron por la crisis, y Argentina vende menos por factores internos como la sequía.
"La Argentina sigue con un nivel de actividad muy razonable", sostuvo Moroni, y agregó que la recaudación de noviembre se había comportado "de acuerdo con lo que fue el mercado internacional". Sin embargo, el funcionario reconoció a Radio América que los resultados de este mes vendrían "con alguna diferencia en lo que es comercio internacional".
Algunos analistas creen que la crisis en las exportaciones recién se sentirá el año próximo, porque los embarques suelen registrarse con precios retrasados en hasta tres meses, según el diario La Nación.
Otros sostienen, además, que también comenzó a resentirse el mercado interno: el Impuesto al Valor Agregado (IVA), un termómetro del consumo local, recaudará alrededor de $6.500 millones, 15% más que en 2007. En octubre, el mismo impuesto creció un 20% respecto del año pasado.
El Gobierno contó con 300.000 millones de pesos en recursos durante 2008, contra los 230.000 millones que tenía presupuestados, según el diario El Cronista Comercial. Si la crisis sigue, el año que viene podría ser menor, aunque hay dos fuentes de ingresos que pueden salvarle las cuentas.
La primera son los $13.000 millones anuales que generará la estatización de los aportes jubilatorios. La otra será la moratoria fiscal y previsional que anunció el Gobierno para 2009: las últimas dos moratorias (lanzadas en 1996 y 2000), aumentaron la recaudación en un 2%, lo que en este marco representaría unos 6.000 millones de pesos más para las arcas estatales.