Los docentes universitarios y el tercer contrato social

Con el objetivo de fortalecer la integración y la cooperación regional e internacional para la transformación de la educación como base para la construcción de una nueva sociedad en la que nadie se quede atrás, se realizó una nueva edición del Congreso Mundial de Educación, coordinado por la organización Kairós.

“Nos corresponde a nosotros ir al encuentro de los desafíos con nuevos modos de enseñanza y aprendizaje sin que eso signifique que las trabadoras y trabajadores vean menoscabados sus derechos”, expresó el investigador en ciencias sociales, Luis Bonilla en la apertura de las jornadas en relación con el rol de los educadores en el contexto de la nueva normalidad.

En la misma dirección, se pronunció el secretario General de la Federación de los Docentes de las Universidades Nacionales (FEDUN), Daniel Ricci, al participar del panel “El papel de los gremios en la implementación del Tercer Contrato Social de la Educación”. En la mesa de debate, Ricci brindó un panorama sobre los desafíos que enfrenta la educación universitaria en general y los docentes universitarios en particular, en un nuevo contexto signado por nuevos esquemas de trabajo.

Al respecto, hizo hincapié en la problemática vinculada al trabajo docente y los tiempos de descanso y desconexión, y la consecuente flexibilidad horaria que, si bien preexistía a la pandemia, fue profundizada ante la necesidad de virtualizar las clases. “Usualmente, las personas trabajan siete u ocho horas y luego tienen derecho a su descanso. En el caso de los docentes, dictan sus horas de clases, pero luego trabajan en sus casas o bares corrigiendo exámenes, preparando clases”, explicó, al tiempo que manifestó que el desafío como sindicato “es garantizar el respeto al horario laboral y el derecho al descanso de los docentes universitarios”.

En este sentido, resaltó la importancia de contar en todos los países con Convenios Colectivos de Trabajo que garanticen estos y otros derechos, especialmente en Latinoamérica, donde “sólo Argentina cuenta con una herramienta de este tipo, que permite establecer un piso de derechos”.

Sobre los desafíos actuales en el sistema educativo, sostuvo que las universidades deben ocupar un importante rol en la defensa de las democracias, especialmente a través de la formación de ciudadanos comprometidos, y de profesionales que desarrollen un respeto fundamental por la ecología, la diversidad sexual y cultural.

Al respecto, el titular de la FEDUN consideró de vital importancia los espacios de encuentro, debate y acción como este, y sostuvo que “KAIROS tiene que ser un protagonista, junto a los Estados, los gremios y diferentes actores vinculados a la educación, en el camino de lograr mantener y mejorar los derechos de los docentes y de todos los trabajadores, y de poner a la educación definitivamente al servicio del progreso de las naciones y de los pueblos”.

El panel estuvo compuesto por Adolfo Fuentes, presidente de la Comisión Presidencial de Derechos Humanos (COPREDEH) de Guatemala y ex secretario General del Consejo Superior Universitario Centroamericano, Irene Rigau, ex consejera de Bienestar Social y de Enseñanza del Gobierno de Cataluña, Marcelo Di Stefano, secretario Ejecutivo de la Confederación de los Trabajadores y Trabajadoras de las Universidades de las Américas (CONTUA), José Olivera, adjunto de la Secretaría General del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM), Mateus Fiorentini, miembro del Comité Ejecutivo de ENLACES, y Bia López, secretaria ejecutiva del Cono Sur de la  Organización Continental Caribeña y Latinoamericana de Estudiantes (OCLAE). Estuvo moderado por Luis Bonilla, coordinador Internacional de la Red Global/Glocal por la calidad educativa.

Sobre Kairós

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