El 22 de noviembre se cumplieron siete décadas de la firma y la promulgación del Decreto 29.337 de 1949, mediante el cual el entonces presidente Juan Domingo Perón estableció la gratuidad de la enseñanza universitaria en nuestro país. La norma posibilitó que miles de argentinos hijos de trabajadores pudieran acceder a la cultura, la educación superior y la formación profesional universitaria.
Ante un nuevo aniversario de aquel hecho que cambió para siempre la historia de la educación argentina, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) presentó un sitio web (http://gratuidaduniversitaria.cin.edu.ar/) donde convergen las acciones de las instituciones universitarias y las producciones audiovisuales alusivas, además de la normativa y otras novedades relacionadas con el tema.
En ese marco, la Federación de Docentes de las Universidades (FEDUN) se sumó a las celebraciones junto a la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Buenos Aires (UBA) con un festival de música, teatro y actividades para toda la familia. Desde el mediodía, en el parque universitario se pudo disfrutar de demostraciones de adiestramiento canino, charlas informativas sobre bienestar animal, la obra de teatro infantil “Una de Animales”, en la que se ilustró la importancia de difundir los derechos de los niños y los animales.
La tarde siguió con “El amor, una deconstrucción”, una charla del filósofo y docente Darío Sztanjnszeajber sobre cómo los seres humanos pendulamos entre una concepción metafísica y otra científica acerca del amor. Luego, con un parque cada vez más colmado, siguió un show a puro rock de Florián, quien manifestó que “es importante sostener la universidad pública y gratuita”.
Antes de una de las presentaciones más esperadas de la tarde, Daniel Ricci, secretario de la FEDUN, recordó la constante lucha de los docentes por la educación pública y la importancia de “poder sostener un derecho en tiempos de un contexto neoliberal y de un gobierno que vulnera los derechos de los trabajadores”. Y culminó instando a “seguir construyendo un proyecto de país democrático, popular y feminista”.
Con una impronta única por su fuerte activismo feminista, Miss Bolivia se encargó del cierre a partir de un recorrido por su discografía, en el que no faltó el reconocimiento a las cantautoras argentinas y a las mujeres desaparecidas. A puro arte, filosofía y música, la jornada concluyó con la multitud coreando los hits Tomate el palo, Bien warrior y Paren de matarnos de la reconocida cantante que fusiona cumbia, hip hop, reggae y dance.
