A ocho meses de la boda de Florencia, una de las hijas de su hermano Mario Cirgiliano, este diciembre le tocó a él, Claudio, ser el anfitrión de la gran fiesta de casamiento de su hija Yamila. El sábado 21, en Espacio Pilar, Yaya –como llaman a la joven– se casó con Tomás Ferrario y para evitar posibles incidentes que pudieran provocar la presencia de medios periodísticos e incluso familiares de víctimas de accidentes de trenes a quienes el apellido Cirigliano les provoca de todo menos felicidad, el padre de la novia organizó un operativo de seguridad que incluyó incluso la presentación de sus correspondientes documentos de identidad a cada invitado. Además, la ceremonia religiosa se realizó dentro del mismo lugar de la fiesta para mantener la privacidad del festejo. Tomás Ferrario es un egresado de la Universidad Católica y actualmente reviste como asesor de PRO en la Legislatura porteña por eso a la fiesta de casamiento estuvieron aquellos que forman parte de su grupo trabajo cotidiano, entre otros Francisco Quintana, diputado macrista y presidente de la Asamblea de esa agrupación, y Ezequiel Fernández Langan, otro de los jovenes macristas que actualmente es director de Autopistas Urbanas. La fiesta, por supuesto, fue a lo grande y se prolongóhasta la madrugada; el catering de Gonzalo Lanusse fue correcto –según dijeron algunos invitados– y fue abundante la oferta de vinos de la bodega Catena Zapata. Pero hubo que lamentar un contratiempo inesperado para el padre de la novia. Enfervorizados y para animar la fiesta, en una de las etapas del baile, los invitados más jóvenes comenzaron a lanzar por el aire a Claudio Cirigliano y al parecer, algunos de ellos no calcuraron bien la caída y el empresario terminó en el suelo y con una muñeca quebrada. Por eso, corridas, susto y puteadas aparte, Cirigliano tuvo que someter el jueves último a una no programada operación quirúrgica. Los novios, pasada la fiesta del 31 de diciembre, comienzan su luna de miel con un periplo elegido por varias parejas este año: primero las bucólicas Islas Maldivas y luego Dubai. (Ver fotos de la pareja en el destacado de esta página).
Celebracion
Antes el cumpleaños de Fabián Perechodnik tenía un obstáculo que igualmente los invitados superaban; era la distancia: lo organizaba en su casa de La Plata y a mitad de semana. Este año, este integrante de Poliarquía mudó el festejo a Recoleta pero el calor de la Ciudad no combinó muy bien con el plato principal: una carne con salsa más propia del invierno. Superado ese detalle, los invitados conversaron e hicieron uso de la barra de tragos donde el champagne y el daiquiri se despacharon en abundancia. Entre ellos estuvieron, Martín Lousteau –que se cortó un poco esa melena adolescente a pedido de su jefa Elisa Carrió–, el nuevo embajador de Francia Jean Michel Casa, Kevin Sullivan y Kerri Hannan, de la embajada de Estados Unidos, y gran parte de la plana mayor del macrismo y del sciolismo.
Compas de espera
Comenzó otro verano esteño y uno de los protagonistas que se repite esta temporada es Eduardo Costantini quien, si logra su cometido de que se comience la construcción del puente sobre la laguna Garzón, en la frontera entre los departamentos de Rocha y Maldonado, seguramente logrará sendas palmas en el hombro. De aprobación por un lado y de rechazo de varios habitantes históricos de José Ignacio a quienes las palabras “puente sobre la laguna” les eriza la piel. Por el momento la decisión para instalar “la piedra fundamental” para el puente –que tiene un diseño circular y no lineal, realizado por el uruguayo Rafael Vignoly –depende de una respuesta del Ministerio de Economía y Finanzas de la vecina orilla. Ese organismo analiza si accede o no al pedido de Costantini de eliminar algunos impuestos a la obra y así abaratar los costos que, en casi un 50 por ciento, correrían por cuenta del argentino. Costantini está interesado en el puente ya que le da un mejor acceso a Las Garzas, el complejo que su empresa desarrolla en Rocha.
Vamos, di que “si”
Aún no terminaba de acomodarse en el despacho que le dejó Federico Sturzenegger en el Banco Ciudad cuando Rogelio Frigerio recibió una consulta de su jefe Mauricio Macri. Y la única opción fue responder afirmativamente. La semana de inicio de la ola de calor en la Capital, y mientras aún no sabía cuál era el teléfono rojo de su despacho, Frigerio atendió un llamado de Macri con la siguiente pregunta: “¿Me bancás con los créditos para la compra de grupos electrógenos?”. La respuesta fue obvia: comenzar la gestión con un “no” no era una buena estrategia.
Ranking
Es costumbre universal la de publicar en estas fechas en los medios, todo tipo de ranking a modo de balance y para hacer entretenida el acercamiento de lectores, sean vía internet o de la manera clásica. Y este año, dos argentinos se ubican en muchos de estos podios por motivos diferentes. Ineludible ha sido en todo diciembre la presencia del papa Francisco, no sólo por ser un latino sino por los gestos que llamaron la atención de católicos y no tantos. Pero fue también Máxima quien logró posicionarse en algunos ranking a convertirse en reina de Holanda en abril último.
“Estallidos” para leer
La semana pasada esta sección dio cuenta de los respectivos libros lanzados por los ex mandatarios españoles Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero cuya lectura seguramente ocupará el tiempo ocioso de algunos políticos locales este verano. Otro que quizá pueda sumarse a ese “grupo social” es Crónicas del estallido, un libro publicado en parte gracias al crowdfunding –financiamiento colectivo– y escrito por el periodista argentino Martín Cúneo y la española Emma Gascó. A lo largo de 400 páginas se relatan algunos “estallidos” que se dieron en la Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Nicaragua, El Salvador, Guatemala y México. Las situaciones contadas en la publicación no conforman un ensayo ni un libro de historia exhaustivo sobre movimientos sociales a gran escala sino que se centra en hechos autogestionados y realizados en contextos de violencia o adversidad, con el objetivo de, por ejemplo, recuperar un servicio de agua privatizado o la recuperación del porteño hotel Bauen por parte de sus trabajadores, que hoy da empleo a 500 personas.
