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Gira presidencial: Protocolo vs. Fashion. Asunto delicado. Panelista en Madrid.

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Gira presidencial: Protocolo vs. Fashion. Sí, Juliana Awada marca tendencia. También es cierto que no hay prenda que no use que no genere en el universo de redes lógicos comentarios positivos. Y algunos diseñadores locales, incluso ponen en sus espacios fotos suyas, cuando ella se viste con prendas de su firma. Basta con visitar una pequeña y onerosa tienda de la galería contigua al Hotel Alvear para ver portarretratos de ese tipo. Pero el rol de primera dama incluye también obligaciones, y no será de la Argentina de donde surja la reformulación de las reglas de protocolo internacional. Por eso, en la gira presidencial que culminó el viernes hubo ítems “reprobados” por expertos del protocolo cuya discreción les sella la boca más fuerte que a algunos involucrados en la causa de los cuadernos. Pero en ese listado varios de ellos coincidieron en: no se puede usar jean, el cabello debe expresar cierto orden, las sandalias y los abotinados nunca reemplazan al calzado cerrado por más fashion que sean, y al menos en la primera foto del inicio de una gira de esta envergadura, convencer al Presidente –y marido– de usar un traje formal con corbata incluida.

Asunto delicado. Tensión, zozobra, cotilleo y mucha discreción. Un poco de todo eso hay desde hace unos días en el tradicional Club Náutico de San Isidro. Y es que para sorpresa de los directivos una socia hizo un pedido que da cuenta de que el cambio de época se va filtrando en muchos estamentos y espacios que deberán aggiornarse más que resistir. Basta recordar que en noviembre del año pasado, el Club Universitario Buenos Aires aprobó una histórica reforma a su estatuto de la institución y tuvo que acceder a que las mujeres sean consideradas socias plenas y no solo “asociadas”... o “adherentes”. El caso del Náutico... es otro. Hace unos diez días la protagonista de esta historia solicitó mediante orden judicial que se la pase a categoría de socio. En dicha orden, expedida por un juez, también se explicitó que se le dé libre acceso a los vestuarios, por haberse cambiado de sexo más allá de su documento, es decir, con operación incluida.

Panelista en Madrid. Por ahora el panelismo en televisión quedó postergado. Pero hace unos días Agustina Kämpfer cumplió ese rol aunque en otra geografía. Fue una de las conferencistas de una Cumbre de Comunicación Política que se realizó en la Universidad Camilo José Cela, en  Madrid. El título de su exposición fue “Derechos feministas en Argentina: de las redes al Parlamento”. Allí, la periodista sostuvo que “en Argentina las mujeres aún tenemos que someternos a las creencias religiosas de quienes votan nuestras leyes, en vez de que ellos acomoden sus creencias a lo que les pedimos en calles y redes”.

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