"Si es para Sabri, hasta te dejo subir al escenario", lanza una colaboradora del teatro. A la hija de Nito Artaza, Sabrina (23), la quieren mucho en el Brodway. Es que antes de ser vedette, era productora y colaboraba en la administración del teatro. Mamó el mundo artístico desde bambalinas. Hoy le toca estar al frente y f orma parte de la obra Carnaval de Estrellas. Pelea por ganarse un lugar y hacerse de una carrera propia.
Sabrina Artaza recibió a Perfil.com luego de terminar la obra. Todavía estaba con el conchero puesto y sólo se había sacado las plumas. Está muy contenta por el momento que está viviendo y cuenta que nunca se hubiera imaginado terminar así.
Nito Artaza la ayudó mucho y le da consejos. Él considera que el mundo del teatro es muy difícil y no quiere que su hija sufra. Ella recibe con gusto los consejos de Nito. Lo respeta y sabe que además de haber tenido suerte, "papá es muy talentoso".
Ser "la hija de", por ahora, no le trae problemas. Al menos la convivencia dentro del teatro es muy buena y recibe consejos de todo el mundo. " Adabel Guerrero me enseña mucho y mi mamá también. Ella es bailarina", cuenta Sabrina.
Reconoce que le gustaría trabajar con su padre, pero prefiere crecer sola y que la gente la vaya a ver a ella. Desde el iluminador hasta sus compañeros de compañía, la quieren. Se hizo de un lugar que muchas anelan y pretende seguir creciendo. El 3 de julio estrena un infantil con Panam en el Brodway 2 y el 13 la comedia musical Juicio a lo Natural en el teatro El Cubo.
Sabrina también habla de política y su interés pasa por lo cotidiano. Por ahora no milita. Prefiere dedicarse a su carrera. En cuanto a su padre, ella lo ve "muy apasionado con lo que hace. Lo único es que está mas estresado que cuando actuaba y gana menos plata".
Ella participa de los proyectos de Nito: "A veces discutimos juntos algunos temas. Hay días que llega y cuenta las cosas que hizo en el Congreso, como un chico que cuenta las cosas que hizo en la escuela". Está contenta con el presente de su padre y le deja un consejo: "cuando se le termine la pasión por lo que está haciendo que lo deje, así como dejó la actuación".
(*) de la redacción de Perfil.com