Cuando la televisión por cable llegó para quedarse y comenzaron a aparecer más de 60 canales, los conversores y el control remoto la vida de muchas personas se complicó seriamente. Mi vieja es una de ellas y por consecuencia la mía tambíen. La pobre, que todavía no entiende por que Canal 11 (el de las pelotas) es el 10, ahora verá como, sin que ella haya apretado mal un botón del control remoto, le vuelven a cambiar la grilla de los canales.
Cómo hago para explicarle que el 13 será Canal 9 y que Canal 7 se verá por el once. Cómo le hago entender que Canal 2 (para ella América sigue siendo Canal 2) ahora es Canal 9, que antes era de Alejandro Romay y que Canal 9, que ahora se ve en el 8, pasará a ser Canal 13. Y que en el ocho ahora podrá ver CN23, un canal que ni siquiera registra.
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Pensé en sentarme con ella con el control remoto en la mano y la televisión de frente para explicarle los cambios. Pero desistí inmediatamente. Al los diez minutos me iba a preguntar: ¿dónde está la novela del 9? Después imaginé hacerle una grilla para pegársela en la puerta de la heladera. Pero tampoco iba a dar resultado porque ella ve la tele en la cama. Por último pensé en decirle que dé de baja el cable así se ahorra 100 pesos de la jubilación de 724 y se evita todos estos cambios. Pero ya me imaginaba subiendo a la terraza del departamento para orientarle la antena de aire. Asi que ni siquiera se lo propuse. Y mientras pensaba todas estas alternativas me llamó por teléfono y me preguntó: "Nene, ¿en qué canal está Tinelli?". La que me espera.
